Impacta relleno sanitario calidad de vida de habitantes de Mérida

Desde 2012, parte del basurero llegó a su capacidad máxima y entonces hicieron una ampliación del mismo

Mérida, Yucatán. Los incendios ocurridos en el relleno sanitario de la ciudad de Mérida no son la única problemática, sino que los sitos también afectan en el día a día a la población que habita cerca, pues no solamente perciben los hedores de forma constante, sino que además encuentran insectos en sus domicilios.

Ingrith León, representante de Cero Basura Yucatán y residente de una zona cercana al relleno sanitario, explicó que este espacio ya tiene 26 años operando allí, “a menos de un kilómetro de donde hay asentamientos humanos”.

Desde el 2012, parte del relleno sanitario llegó a su capacidad máxima y entonces hicieron una ampliación del mismo; además, recordó que mediante Programa Estatal para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos (https://www.gob.mx/cms/uploads/attachment/file/187447/Yucatan.pdf) acordaron desde hace unos meses que este mismo sitio recibiera los residuos de seis municipios más.

Hace aproximadamente un mes, continuó, informaron que para marzo los residuos que allí reciben serían separados para reciclar o hacer pelets que se enviarían a Europa para que utilicen como combustible.

“Pero en lo que eso ocurre sí ha habido afectaciones, no nada más en cuestión de incendios […] las mismas personas que se encuentran en las zonas más cercanas al relleno comentan ciertas afectaciones”.

Los incendios el los rellenos sanitarios pueden ser de manera superficial o subterránea, explicó, la primera ocurre por fuentes externas –meteorología, vientos, temperatura– o internas –errores humanos– del relleno.

La falta de la separación de basura, dijo, incrementa la problemática; en específico, el gas metano es uno de los contaminantes presentes en el relleno sanitario, junto con los lixiviados que produce la basura revuelta.

Esta misma situación, lejos de los incendios, provoca problemáticas como el mal olor en los domicilios cercanos, así como la presencia de cucarachas y otros insectos en los hogares cercanos. Además, los propios incendios les causan temas de salud, tales como la “rasquera” en la garganta.

En la ciudad no hay un estudio con respecto a las afectaciones ocasionadas en el ambiente ni en la salud de las personas por los incendios que han ocurrido en el relleno, expuso; sin embargo, la activista declaró que el tipo de desechos que se incendian pueden cambiar los efectos, pues hay algunos materiales que generan muchas toxinas, tales como las baterías.

Por ello, resaltó la importancia de separar la basura, en especial aquellos residuos que son más tóxicos, pero en general realizó la invitación a efectuar esta separación y llevar a los puntos de acopio; además de esto, sugirió “la recuperación de materiales y el cambio en ciertos hábitos de consumo, hacer una reducción en cuanto a cierto tipo de materiales como los plásticos”.

Expuso también que es necesario que el ayuntamiento y la empresa que gestiona el relleno conozcan las causas de los incendios para determinar cuáles serán las acciones al respecto.

(Con informacioón de La Jornada Maya)

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