El convenio Yunes-Peña para atacar a AMLO
Siendo candidato a la gubernatura, el panista Miguel Ángel Yunes Linares presentó una denuncia contra el entonces gobernador de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa, quien a su vez también demandó al entonces abanderado albiazul.
La cuestión es que todos sabemos cómo Duarte ha sido perseguido y encarcelado por los delitos que presuntamente cometió contra el erario veracruzano, pero nadie se explica por qué razón el ahora gobernador, Yunes Linares, no ha sido encarcelado por los delitos por los que fue acusado.
Y no es por el fuero, puesto que se pudo haber procedido antes de que fuera elegido e, incluso, luego de ser electo pero antes de asumir el mandato o, ¿por qué no?, desaforarlo aunque hubiera tomado posesión del cargo.
El secreto está en la amenaza que el propio Yunes hiciera en su calidad de candidato electo, de revelar datos que pondrían en tela de juicio al propio titular del Poder Ejecutivo de México, Enrique Peña Nieto.
El presidente llamó a Yunes Linares a Los Pinos en donde ambos malandros lograron un acuerdo en contra de los intereses de los mexicanos, pues en caso de haberse concretado, ambos personajes tendrían que estar en la cárcel.
Obvio, no era cuestión nada más de ya no te envío a la cárcel, sino qué servicio podían prestarse mutuamente.
El mandatario veracruzano no solamente obtuvo la exoneración a priori por parte del Ejecutivo, sino la asignación de recursos presunta y misteriosamente “recuperados” de las transas hechas por Javier Duarte en la entidad veracruzana.
Por su parte, el Ejecutivo Federal obtuvo, además del silencio cómplice del gobernador, algo muy pero muy preciado: una estrategia para bajar la popularidad del líder Morena, Andrés Manuel López Obrador.
Las acciones emprendidas por Miguel Ángel Yunes se pueden percibir así en una perspectiva más adecuada, pues empleó a gente tan cerca como su procurador de Justicia para tratar de implicar a AMLO en la recepción de dinero para campañas (para el efecto empleó a la propia hermana del funcionario de procuración de justicia y a una, casualmente, ex correligionaria panista que asumió la candidatura a una alcaldía de Veracruz).
Como todos saben, recurrieron a una vieja estrategia aplicada anteriormente: la grabación de videos donde la presunta candidata dice recibir dinero para López Obrador, cosa que la propia implicada ha dicho que se devolvió el total de los recursos al no ser aceptados por el partido.
Desde luego, esta guerra sucia auspiciada desde Los Pinos y operada por funcionarios veracruzanos ha recibido la más amplia difusión a través de toso aquellos medios de comunicación oficialistas beneficiados con recursos públicos.
El remate vendrá con la ‘revelación’ del expediente de AMLO, según dice el gobernador de Veracruz, pero si usted lo piensa un poco, sí el dirigente de Morena ha cometido actos ilícitos que ameriten la cárcel, el gobierno federal ya debería haber actuado en lugar de mandar a un achichincle albiazul a realizar la tarea de la PGR.
Desde luego, usted puede seguir creyendo las falsas noticias o asumir su responsabilidad como ciudadano de buscar información veraz que le permita tomar las mejores decisiones para usted y su familia.
