Exigen en Colombia que pare el genocidio contra indígenas

Convoca líder aborigen a una movilización nacional por la vida al tiempo que exige al Estado el cumplimiento del Acuerdo de Paz

Bogotá, Colombia. La exigencia de que pare el genocidio indígena en Colombia reunió hoy a cientos de personas en las plazas de este país donde los miembros de las comunidades nativas son víctimas de la violencia.

La iniciativa fue convocada tras el asesinato de cinco nativos a manos de grupos armados en la localidad de Tacueyó, departamento del Cauca (suroeste).

Guardia indígena estamos contigo, sí a la vida, fuera violentos de los territorios y alto a la guerra contra el pueblo, son algunas de las frases escritas en los carteles que mostraron los movilizados.

En un contexto marcado por las acciones violentas, Luis Kankui, consejero mayor de la Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC), convocó este miércoles a una movilización nacional por la vida al tiempo que exigió al Estado el cumplimiento del Acuerdo de Paz.

Convocamos a toda la sociedad colombiana a levantarnos en defensa de la vida, los derechos y los territorios el próximo 8 de noviembre.

En opinión de Kankui, ‘estos hechos son la continuidad del genocidio indígena que se ha venido denunciando desde la ONIC, sin tener la respuesta contundente por parte del gobierno nacional’.

Seguiremos en defensa de la vida, la paz y el territorio de los pueblos indígenas. Rechazamos la masacre de la que fueron víctima nuestros hermanos que se da en el marco del genocidio del que son víctima los pueblos nativos producto de la no implementación del Acuerdo de Paz (firmado en 2016 por el Estado y la exguerrilla FARC-EP), apuntó.

El incumplimiento de los acuerdos está llevando al incremento de los cultivos de marihuana y coca en todo el territorio nacional. Los autoridades y guardias indígenas en sus ejercicios de control territorial y la autonomía enmarcada en las leyes de origen, la constitución nacional y los decretos internacionales, son perseguidos, amenazados, asesinados y masacrados, subrayó.

Por ello, la ONIC exigió al Estado que ‘pare el desangre de los pueblos indígenas que se configura en un genocidio y, en virtud de ello, adoptar las medidas necesarias para superar la grave situación de emergencia humanitaria, social, económica y cultural que sufren e implemente el Acuerdo’.

Requerimos el acompañamiento de una misión de verificación del genocidio para que presencie todas las afectaciones que se viven a causa del conflicto armado, el extractivismo y las políticas de desarrollo del Estado, puntualizó.

Por su parte, el presidente Iván Duque ordenó desplegar dos mil 500 hombres de la Fuerza de Despliegue Rápido en el Cauca, tras la masacre en Tacueyó.

El Consejo Regional Indígena del Cauca dijo que no considera a la fuerza pública como ‘garantía de protección, mucho menos en un momento en que se encuentra rodeada de escándalos’. Necesitamos soluciones por parte del gobierno nacional que respeten nuestra autonomía territorial y nuestra jurisdicción especial, añadió.

(Con información de Prensa Latina)

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