La lucha contra el dolor en los adultos mayores

Más del 50% de la población mayor de 65 años presenta algún tipo de osteoartritis, siendo la articulación más afectada la rodilla

Luchar contra algo que no se ve y tampoco se puede medir es sin duda un gran desafío para los médicos de la unidad del dolor, dice Jordi Moya Riera, licenciado en Medicina y Cirugía y Especialista en Anestesiología-Reanimación Terapéutica del Dolor.

A medida que la población envejece, ¿aumenta también la incidencia del dolor crónico?

Es evidente que, a mayor edad, mayor número de enfermedades crónicas que cursan en algún momento de su evolución con dolor. El ejemplo más relevante sería la artrosis. Más del 50% de la población mayor de 65 años presenta algún tipo de osteoartritis, siendo la articulación más afectada la rodilla.

Normalmente, el dolor es uno de los síntomas de una enfermedad, pero, ¿el dolor crónico se puede considerar una enfermedad en sí?

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha presentado la CIE-11, su última revisión de la Clasificación Internacional de Enfermedades, que incluye un nuevo sistema de categorización para el dolor crónico. La decisión fue tomada en la Asamblea Mundial de la Salud celebrada en mayo de 2019. Los facultativos que tratan a muchos pacientes con dolor crónico, independientemente de la causa que lo origine, lo acaban considerando una enfermedad en sí misma, y lo tratan como tal.

¿Qué son las Unidades del Dolor? ¿Cómo funcionan?

La Unidad del Dolor es una organización de profesionales de la salud que ofrece asistencia multidisciplinar, que cumple con los requisitos funcionales, estructurales y organizativos que garantizan condiciones de seguridad, calidad y eficiencia adecuadas para atender al paciente con dolor crónico que requiera asistencia especializada.

Desde la Unidad del Dolor se elaboran planes de tratamiento integral con el que poder recuperar, en la medida de lo posible, el bienestar físico y emocional del paciente. En definitiva, se trata de recuperar al máximo la calidad de vida del paciente.

¿Cómo se evalúa a un paciente con dolor crónico?

La máxima en medicina que “no existen enfermedades sino enfermos” se eleva a su máximo exponente en el tratamiento del dolor. Una detallada historia clínica, junto a las pruebas diagnostica, es lo que nos lleva a un buen diagnóstico y por lo tanto a la aplicación del tratamiento más adecuado.

¿Qué tipos de dolor se atienden en las unidades del dolor?

A una Unidad del dolor acuden fundamentalmente pacientes con problemas de:

– Espalda: lumbalgia, cervicalgia, dorsalgia, lumbociática, dolor de la espalda operada o espalda fallida, radiculopatía, ciáticas, sacralgias…

– Dolor miofascial y dolor muscular (contracturas persistentes que no se han aliviado con los tratamientos convencionales), etc.

– Dolor neuropático, neuropatía diabética, neuropatías periféricas, neuralgia postherpética, neuralgia del trigémino, dolor regional complejo.

– Fibromialgia.

– Artritis o artrosis más frecuentemente en columna, hombros, caderas o rodillas.

¿Considera que el tratamiento del dolor crónico es un verdadero desafío para un especialista?

Luchar contra algo que no se ve y tampoco se puede medir es sin duda un gran desafío para los médicos de la unidad del dolor, más cuando sabemos que afecta al 20% de la población mundial según la Organización Mundial de la Salud.

Centrándonos en las terapias alternativas, como la acupuntura, ¿resultan efectivas para el tratamiento del dolor?

El tratamiento del dolor es multidisciplinar, en el caben todas las disciplinas científicamente probadas. Pero hay que tener cuidado de no utilizar las terapias no basadas en la evidencia científica, que podrían no solo ser un engaño si no que pueden poner en peligro la salud de los pacientes.

La Asociación para Proteger al Enfermo de las Terapias Pseudocientíficas (APETP) es una organización compuesta por afectados, médicos e investigadores con el objetivo de luchar contra la desinformación y las estafas sanitarias.

¿Qué hay sobre los opioides?

Los opiodes son una gran pieza de ese traje a medida que se debe elaborar a cada paciente, buscando los mejores efectos terapéuticos con los menores efectos secundarios. Sin embargo, no son la panacea y requieren un estrecho seguimiento por el médico que los prescribe.

¿Considera que los pacientes de dolor crónico deberían de recibir también tratamiento psicológico?

La psicología representa esa otra gran pieza del tratamiento del dolor crónico. Estar afectado por algo que no se ve, no se puede medir y no tiene cura, realmente se puede beneficiar del apoyo psicológico.

¿Cuáles son los principales avances relacionados con el tratamiento del dolor?

Más que un avance espectacular con un producto o técnica, el avance más importante ha sido la apertura de unidades del dolor en muchos hospitales públicos y privados españoles, hoy tenemos unas 183 en total.

En España, se estima que el dolor crónico afecta, aproximadamente, al 18% de la población. Con los avances que se han desarrollado en las diferentes disciplinas de la salud, ¿no hay medidas eficaces para mejorar la calidad de vida de estas personas?

Últimamente se recomienda el ejercicio físico moderado y adaptado a cada paciente por los grandes beneficios que ello aporta a la salud. Por el contrario, ejercicios no adecuados para la enfermedad del paciente pueden ser perjudiciales, de ahí la necesidad de ponerse en manos de profesionales para adaptar los ejercicios a cada paciente.

(Con información de noticiasensalud.com)

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Social Media Auto Publish Powered By : XYZScripts.com