Acusan parcialidad de Arely Díaz en combate a ambulantes

Tuxtla Gutiérrez. Mientras que contra unos ordena su retiro hasta de forma violenta, a otros simplemente los consiente, les permite seguir vendiendo en pleno centro de la capital que inspira sin que ningún fiscal los moleste, así se comporta la titular de política fiscal de la ciudad segura de Tuxtla Gutiérrez, Silvia Arely Díaz Santiago.

Cinturones, gorras, controles de tv y cable piratas son algunos de los productos que se promocionan y venden en las banquetas de Tuxtla Gutiérrez, esto pese al plan de retiro masivo de vendedores ambulantes implementado en enero del 2017 y fuertemente publicitado por Díaz Santiago y el munícipe Luis Fernando Castellanos Cal y Mayor a quién hace unas semanas destapara como candidato a gobernador la organización más violenta del país: Antorcha Campesina.

Es de la primera a la sexta sur donde se puede observar el resurgimiento de la venta irregular, explicó Cándida Hernández, comerciante del centro de Tuxtla Gutiérrez.

“Venden lo mismo que nosotros los que paganos una renta; bolsas, cinturones, aparatos electrónicos y ropa, en verdad creímos que este año se implementaría otra vez el programa de retiro del ambulantes, pero las banquetas poco a poco se empiezan a llenar”, dijo.

Asimismo, Octavio Aguilar Santos, vendedor establecido en la calle central, mencionó que a un año de ejecutarse el plan municipal de retiro del ambulantaje en el primer cuadro de la ciudad, el ayuntamiento ha dejado de darle seguimiento al programa, ya que en cada cuadra se pueden encontrar de tres a cinco vendedores irregulares.

“Es toda una lástima que nos engañé el alcalde, dice que el operativo persiste pero acá está a la luz del día, o nos hacemos los ciegos o qué, porque nosotros si ya estamos mal en nuestras ventas, los vendedores de cada cuadra que son como de tres a cinco por cada una más no dejan sin venta”, resonó.

A lo anterior, dijo que el problema no se soluciona vigilando las banquetas todos los días, o habilitando policías en cada esquina, sino fortaleciendo la bolsa laboral.

“Es fácil poner 300, 500 policías en el centro, pero llega un punto en que estos son estáticos. Claro intimidan pero la gente se las ingenia para vender, lo mejor sería abrir un programa o algo para que ellos entren en la formalidad”, planteó.

Cabe hacer mención, que durante el 2017 el edil municipal, Fernando Castellanos Cal y Mayor, reiteró que el problema del ambulantaje no fue generado durante su mandato, sin embargo, no precisó el “mito” de que la coordinadora general de Política Fiscal de su administración, Silvia Arely Díaz, es uno de los posibles funcionarios involucrados en la venta de espacios públicos.

“En las administraciones anteriores se vendió cada centímetro cuadrado de banqueta, y hubo muchísimo dinero que fue a caer a bolsillos de personajes que se prestaron a este tipo de cuestiones”, puntualizó en ese entonces el alcalde.

(Con información de Diario Contra Poder en Chiapas)

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