Quitan ‘ley seca’ en Yucatán justo en el mes patrio
La venta que realizan los expendios será exclusivamente con servicio a domicilio y limitando la cantidad de producto que se puede adquirir
Mérida, Yucatán. Este martes, se reanuda la venta de bebidas alcohólicas en Yucatán; con la publicación del decreto 275/2020 en el Diario Oficial, a partir de las 10 horas de este martes queda anulada la prohibición de su venta y consumo. Es el fin de la Ley Seca, por lo menos durante un mes.
El decreto contempla la reactivación paulatina de venta de cerveza y licor en la entidad. Desde el 28 de agosto, los camiones surtidores recorren las calles de Mérida -y sus municipios- abasteciendo a sus concesionarios y algunas agencias ya reciben pedidos que entregarán a domicilio.
El gobernador Mauricio Vila Dosal sostuvo varias mesas de trabajo con quienes encabezan las cámaras empresariales y entre los consensos, se acordó “levantar” la medida antes de lo estipulado, que era el 17 de septiembre.
Según el documento publicado en el Diario Oficial, el esquema bajo el que operarán los expendios será exclusivamente con servicio a domicilio y limitando la cantidad de producto que se puede adquirir. Únicamente se podrán comprar 24 latas; 24 cuartitas; nueve caguamas; siete misiles; y mil 250 mililitros de licor.
En el caso de los restauranteros, que jugaron un papel importante en la cancelación de la medida, podrán comerciar con bebidas alcohólicas los lunes, martes miércoles y jueves de 12 a 22 horas; y de 12 a 18 horas los sábados y domingos, siempre y cuando estén acompañadas de alimentos.
Clandestinos “hicieron su agosto”
La Ley Seca ha sido una de las medidas más controversiales impuestas por las autoridades en aras de la salud. En redes sociales generó opiniones encontradas y los cibernautas expusieron sus argumentos a favor o en contra de la prohibición. Tampoco es secreto para nadie que los clandestinos “hicieron su agosto” a costa de la situación.
Al día de hoy una buena cantidad de estos “emprendedores se quedó con bodegas llenas de cervezas y licores, que en muchos casos compraron a sobreprecio. Luego de la publicación del decreto ellos tuvieron cuatro días para “darle salida” a la mercancía, y en muchos casos la remataron.
Existen mayoristas que tenían bodegas repletas de espumosas y que ahora regresarán a sus actividades normales; sin embargo, también hay minoristas que adquirieron grandes cantidades a precios elevados y se conformaban con ganar un poco de dinero.
Uno de ellos es El Chivo, quien hace menos de una semana adquirió 50 planchas de Tecate Light a 500 pesos cada una; y planeaba venderlas en 800. A ese “clandestino” el levantamiento de la ley seca le cayó “como un balde de agua fría”.
Al contemplar que la prohibición se levantaría el 17 de septiembre, como se había anunciado, su plan de “negocios” lo diseñaron en función a esta fecha.
No es bola cantada
El hecho que quiten la Ley Seca representa un respiro para cientos de familias cuyas actividades están, en mayor o menor medida, ligadas a la venta de alcohol. Concesionarios, restauranteros, meseros, turisteros y demás rubros están relacionados con su comercialización e incluso los primeros se manifestaron en la Plaza Grande.
Tampoco se trata de “bola cantada”, pues el decreto que permite la venta de alcohol se invalidará a partir del primer minuto de octubre.
De la evolución del semáforo estatal y la ocupación hospitalaria dependerá que miles de negocios yucatecos puedan operar con normalidad, situación que a algunos quita el sueño; y a otros devuelve la esperanza de lucrar con esta medida.
(Con información de La Jornada Maya)