Discriminación de género y racial deben parar: Yalitza
“Yo soy indígena y porto mi ropa cuando quiero y porque yo quiero, no para tomarme una foto”, citó la actriz a una poeta y activista
Mérida, Yucatán. “Personas que al igual que yo de pequeña no se sentían identificadas con lo que veían en las películas y ahora tengan la oportunidad de hacerlo. Muchas mujeres se me acercaban y me decían: estás cambiando muchas cosas porque muestras que, a pesar de tus orígenes, de tu físico, de lo que tú quieras, estás ahí. Y aunque digan, juzguen y critiquen no te van a quitar”, compartió Yalitza Aparicio en Mérida.
La actriz fue la última invitada antes de la clausura de la Cumbre de Mujeres Líderes Latinoamericanas con la charla “El poder de creer en ti”, este 27 de septiembre.
La actriz de Roma contó cómo antes de la película nunca se imaginó que el cine fuera un mundo al que podría aspirar porque las personas que aparecen ahí no se parecen a ella. Incluso le parecía que mirar películas y ver televisión era una pérdida de tiempo, ahora ella es la que ve películas.
“Alfonso nos preguntó a Marina de Tavira y a mí si teníamos tiempo de hacer la película. Por mi mente pasó que acababa de terminar la carrera, tenía que pagar los trámites y no iba a ser fácil encontrar trabajo con la situación del país. Lo vi como una forma de estudiar a través de la práctica, me había hablado de una forma tan bonita de la historia y el personaje…Así que contesté: sí, no tengo nada mejor que hacer. Él se soltó a reír y yo me dije: ¿lo dije o lo pensé?”, contó entre risas.
Cuando dieron la noticia de que ya tenían el personaje de Cleo, todos empezaron a aplaudir emocionados. Hasta ese punto, ella no sabía que la búsqueda de la actriz para el personaje había costado meses, que más de tres mil 500 mujeres de varios estados habían hecho la prueba.
“Creo que entendí la magnitud de las cosas cuando conocí a Libo y dije: chin, no, no lo puedo hacer. No creo ser capaz de representar a esta mujer tan increíble. No sé actuar ni expresar mis emociones”, agregó.
Sobre el tema al que da pie la película, las trabajadoras del hogar y la forma en la que son tratadas dentro de una casa, contó que después del estreno platicó con Marcelina Bautista, activista y trabajadora doméstica mexicana que fundó el Sindicato Nacional de Trabajadores y Trabajadoras del Hogar.
“Ella me decía que ésta era una de tantas historias. Pero desafortunadamente hay otras historias muy feas donde los empleadores tratan muy mal a las empleadas. Las tienen trabajando todo el día, sin un pago justo y es verdaderamente una explotación.
“El personaje de Cleo permitió que se hablara de ellas. Que una película haya ayudado a la lucha de estos derechos fue maravilloso, ellas han luchado por años, la película solo fue un empujón para que las personas abrieran los ojos”, aclaró.
Su discurso más fuerte fue cuando pidió dejar atrás ideas racistas, que no por un color de piel eres incapaz de hacer un trabajo o eres ignorante. Espera que en el futuro lleguen otras personas y ella pueda servir como un precedente de que sí se pueden hacer las cosas.
Le preguntaron cómo sobrelleva los comentarios negativos ahora que está en la mirada del público y los cuestionamientos que le hacen sobre si cambiará su forma de vestir o de ser ahora que es famosa.
“Mi forma de vestir no la he cambiado, aunque en ocasiones me dicen que por qué no porto la ropa de mi comunidad. En mi comunidad, desafortunadamente, hace años que se perdió eso. Hace unos días estuve en Monterrey y conocí a una poeta y activista indígena que me dijo: yo soy indígena y porto mi ropa cuando quiero y porque yo quiero, no para tomarme una foto”, dijo.
Sobre el segundo punto, lamentó que la sociedad haya caído en la ignorancia para ofender a los demás con palabras cuyo significado no conocen. Contó que cuando leía los comentarios donde algunas personas la criticaban porque “no hablaba” en la película, ella pensaba que hubiera sido maravilloso no tener que hablar para no tener que aprender mixteco cinco minutos antes de grabar.
También habló de la necesidad de que las mujeres se apoyen entre ellas, pues dijo que una mujer ya sufre demasiado con el mundo exterior ante la falta de equidad de género como para no motivarse entre ellas.
(Con información de La Jornada Maya)