5 mil personas en concierto de Orquesta Sinfónica de Yucatán
La máxima agrupación musical de la entidad yucateca ofreció un magno concierto en el moderno auditorio de La Plancha
Mérida, Yucatán. A la par de otras ciudades del mundo, donde prestigiadas filarmónicas han ofrecido lo mejor de la música en conciertos masivos, en el anfiteatro de La Plancha y alrededores cerca de 5 mil personas escucharon y ovacionaron a la Orquesta Sinfónica de Yucatán.
Por iniciativa del gobernador Joaquín Díaz Mena, de acercar los bienes de la cultura a toda la sociedad yucateca, la máxima agrupación musical del estado ofreció un magno concierto en el moderno auditorio, el cual estuvo ocupado en su totalidad por unos 3 mil asistentes, más los que la escucharon de pie en los alrededores y en los puentes peatonales.
Con obras de los compositores Daniel Ayala, Manuel Esperón, Gustavo Escalante, Blas Galindo, Gustavo Ríos, Arturo Márquez y José Pablo Moncayo, además de Ricardo Palmerín, la OSY dirigida por el maestro José Arean enalteció al público con un repertorio inspirado en las tradiciones mayas y en la cultura musical de México.
Titulado «Del destino al ideal: concierto dedicado al Renacimiento Maya», el concierto promovido por Díaz Mena tocó las fibras del corazón de los presentes que, con frenesí, reaccionaron a reconocidos pasajes de la música de Esperón titulada Suite 1910 y los Sones de Mariachi de Galindo.
El entusiasmo fue desbordante al escuchar las claves, timbales y arcadas de las cuerdas en el Danzón No 2 de Arturo Márquez, el más exitoso de los danzones creados por el sonorense y que le ha dado la vuelta al mundo con el sello del águila azteca.
«La orquesta es de todos», aseveró el titular de la sinfónica en concordancia con el propósito del gobierno de Díaz Mena de acercar la orquesta de manera más abierta y frecuente a la población del estado, como parte de distribuir los bienes de la cultura y las artes a todo el territorio.
El júbilo, las ovaciones y la apoteosis se desencadenaron con la interpretación de Huapango de José Pablo Moncayo. Las primeras notas pusieron chinita la piel y en la medida que sonaban las notas la atención del público fue total.
Ni una palabra, menos una gota de agua de lluvia -que Chaac retuvo con benevolencia-, nada trascendió más que el silencio del auditorio ante la monumental obra de Moncayo, la cual ha trascendido en el país, en el mundo y en la historia de la música.
La orquesta se apropió de los oídos, la sensibilidad y el espíritu nacionalista de los oyentes, los que quedaron prendados de los ritmos veracruzanos del El siquisirí, El Balajú y El gavilancillo que el compositor jalisciense incorporó en su ya inmortal obra que es considerada el segundo himno nacional mexicano.
A los trinos del arpa, secundada por las cuerdas y los metales, siguieron los vertiginosos contrastes armónicos de cornos y trompetas hasta alcanzar el climax, el final. Entonces vino la euforia de los propios músicos con un ¡viva México! y el público lloró y de pie ovacionó con intensas palmas a su orquesta, la Sinfónica de Yucatán.
Bajo la batuta y breves comentarios del maestro Areán, la OSY marcó el momento sublime con la interpretación de Peregrina del insigne compositor yucateco Ricardo Palmerín, con arreglos del maestro Pedro Carlos Herrera, titular de la Orquesta Típica de Yukalpetén, lo que mereció el tributo del público yucateco.
“Vamos por una orquesta sinfónica al alcance de todos”, es la divisa de Patricia Martín Briceño, flamante titular de le Secretaria de Cultura y las Artes de Yucatán, quien expresó su propósito de llevar el arte y compartir los bienes culturales con la población y a todos los rincones del estado.
Así como ocurre en los Jardines del Palacio de Schönbrunn, Viena, Austria; en el Hyde Park de Londres, Reino Unido; en el Central Park de Nueva York y en otros parques de Estados Unidos, en Mérida, México, la Sinfónica de Yucatán compartió su música y recibió la aclamación por sus 20 años de trayectoria artística.
Al concierto asistieron además del gobernador su esposa Wendy Méndez Naal y sus hijos Joaquín y Julián; la titular de la Secretaría de investigación, Innovación y Educación Superior, Geovana Campos y otros funcionarios del gobierno del estado.
Entre el público también se encontraban el delegado de los Programas para el Desarrollo de Yucatán, Rogerio Castro Vázquez, el senador Jorge Carlos Ramírez Marín y oficiales de las fuerzas armadas.
(Con información de La Jornada Maya)