Taxistas contra Uber, la batalla continúa
En lugar de preparar a los conductores, modernizar sus vehículos, mejorar el servicio e implementar plataformas tecnológicas, e l Frente Único de Trabajadores del Volante alista una marcha multitudinaria.
Eso sin considerar la batalla jurisdiccional ni la lucha en el poder legislativo de los estados donde se pretende convocar a taxistas: Quintana Roo, Campeche, Tabasco, Chiapas y Veracruz en contra de la entrada de Uber en estas entidades.
Para los taxistas, esta marcha podrían considerarla la madre de todas las batallas pero en realidad no toman en cuenta que es la propia sociedad la que desea la entrada de Uber y que el clima político-electoral no depende ya de los acarreos que acostumbran realizar.
Aunque “tentativamente” la fecha de esta movilización será el martes de la siguiente semana, el día se decidirá en una asamblea a realizarse el próximo viernes en Tabasco.
La protesta se acordó ayer al mediodía en Mérida, Yucatán, luego de que la semana pasada se oficializó la entrada de Uber en Cancún.
Se trata de una “marcha pacífica a nivel peninsular en jurisdicciones estatales y federales, en los que se espera la participación de más de 10 mil vehículos entre taxis de ruleteo, turísticos y otros transportistas de servicio público, además de particulares que se solidarizan con la causa”, de acuerdo con la dirigencia del Sindicato de Taxistas Andrés Quintana Roo, consede en Cancún.
La asamblea se realizó ante la asistencia de más de cinco mil taxistas que, según la versión oficial del Frente, otorgaron el apoyo gremial para que el líder del sindicato, Erick Castillo, despliegue las estrategias legales para detener la entrada de Uber a Cancún, Solidaridad y Bacalar,
A su vez, se anunciaron marchas pacíficas en el Congreso de Quintana Roo en caso de que la XV Legislatura del estado pretenda reformar el artículo 31 Bis de la Ley de Tránsito, Transporte y Explotación de Vías y Carreteras del Estado de Quintana Roo.
Hasta el día de ayer, se habían reportado 41 detenciones de vehículos “socios” de Uber, a los que se le están aplicando multas de hasta 800 salarios mínimos más el costo del arrastre por grúa hasta el corralón. (Con información de El Economista)
