Se han perdido más de 1 millón 830 mil empleos en México
Ciudad de México. La falta de crecimiento económico sólido y heterogéneo del país ha originado desde 2001 la pérdida de más de 1.83 millones de empleos que contaban con remuneraciones superiores a 5 salarios mínimos, por lo que el Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (IDIC) consideró que es necesario implementar un programa de reactivación económica diferenciado por región y sector en la última parte de la actual administración.
Un análisis de ese instituto indica que la apertura comercial de México no ha sido suficiente para contrarrestar el erosionado sistema productivo, pues las empresas se enfrentan a regulación excesiva e inapropiada, inseguridad, altos costos en los energéticos, un sistema educativo poco vinculado con las necesidades productivas, infraestructura obsoleta, escaso financiamiento público y privado, entre otros factores que constituyen un entorno poco favorable.
Explica que el modelo de apertura México se ha desindustrializado debido a la maquila y al no haber fortalecido al mercado interno, el mercado laboral pagó las consecuencias. De acuerdo con datos originales del Instituto Nacional de Estadística y Geografía y la Secretaría del Trabajo y Previsión Social desde el cuarto trimestre del año 2000 hasta el primer trimestre de este año han desaparecido 1.83 millones de empleos que pagan más de 5 salarios mínimos, lo cual significa que quienes está en edad legal de laborar no encuentran puestos laborales que paguen mejor.
El análisis del IDIC señala que “mientras desaparecen las oportunidades para quienes ganan más de 5 salarios mínimos, se crean las que perciben menos de un salario mínimo.” Como ejemplo cita que entre el cuarto trimestre de 2000 y el primero de 2017 se generaron 854 mil puestos de trabajo que perciben menos de un salario mínimo.
El texto del instituto dirigido por José Luis de la Cruz, indica que sólo seis entidades lograron reducir el número de personas que reciben los minisalarios: Veracruz (123.3 mil), Oaxaca (-89.9 mil), Jalisco (-22.8 mil), Estado de México (-46.6 mil), Zacatecas (-1.9 mil), y Querétaro (-1.9 mil). Mientras que los estados donde más avanzó la cantidad de trabajadores que perciben menos de un salario mínimo fue Guerrero (137.6 mil), Tamaulipas (112 mil), Guanajuato (79.9 mil), Chiapas (79.9 mil), Hidalgo (72.8 mil) y Nuevo León (71.6 mil).
Señaló que lo anterior se correlaciona con la precarización del mercado laboral, problema originado por el modelo económico de baja competitividad y productividad implementado desde hace 30 años.
En ese tenor, el IDIC señala que las entidades donde más avanzó la precarización fue Baja California (84.8 por ciento), Nuevo León con 58. puntos porcentuales, Ciudad de México (48.1 por ciento), Tamaulipas con 37.4 por ciento y Quintana Roo (35.7 puntos porcentuales).
El análisis señala que este problema creció entre los años 2007 y 2012, cuando los efectos previos a la recesión de 2008-2009 afectaron a la economía y en particular al sector industrial.
Si bien Veracruz, Hidalgo, Morelos, Colima, Oaxaca y la Ciudad de México son los estados donde la precarización laboral se incrementado después de ese periodo de crisis, el caso de la capital mexicana es especial porque la falta de industria en esa área no ha sido compensada por otra actividad económica que permita mejorar las condiciones económicas.
El IDIC también señaló que la crisis energética que enfrenta el país limita la capacidad de recuperación económica, por ello los estados petroleros (Campeche Veracruz, Tabasco, Chiapas y Tamaulipas) contabilizaron entre 2013 y 2016 el crecimiento promedio anual más bajo.
Ante un débil crecimiento del país –pues desde 2001 la tasa promedio es de 2.2 por ciento–, el IDIC consideró necesario imponer un programa económico de reactivación, el cual tenga la característica de estar diferenciado por región y por sector, pues es la única forma de solventar la precariedad laboral.
(Con información de La Jornada)