Protestarán contra corrupción e impunidad en Guatemala
Guatemala. Los parques centrales de toda Guatemala serán el punto de encuentro de una nueva movilización nacional convocada por la Asamblea Ciudadana contra la Corrupción y la Impunidad, el próximo 16 de noviembre.
Según el llamado, ese día aspiran a colmar las distintas plazas del país y el Congreso de la República, en una protesta similar al Paro Nacional del pasado 20 de septiembre.
La renuncia del presidente guatemalteco, Jimmy Morales, la dimisión de los diputados que avalaron un denominado pacto de corruptos y las reformas a la Ley Electoral y de partidos políticos, serán las peticiones principales de los manifestantes.
De acuerdo con analistas, la Asamblea Ciudadana constituye el primer esfuerzo por dar estructura orgánica al combate contra la corrupción que se ha adueñado de la sociedad a todos los niveles.
El colectivo está integrado por pueblos indígenas, campesinos, mujeres, jóvenes, trabajadores, académicos, empresarios, artistas, migrantes y residentes en el extranjero, según un comunicado difundido en octubre por la organización al anunciar su entrada en la lucha social.
Con el hashtag LasPlazasHablan, miles de guatemaltecos en todo el país y residentes en el extranjero se sumaron a la convocatoria de la Asamblea Ciudadana el pasado 11 de octubre para impulsar reformas que permitan promover cambios políticos profundos.
Sus integrantes exigen la renuncia de la mayoría de los 158 diputados que votaron dos veces en septiembre último a favor de mantener la inmunidad de Morales e intentaron modificar el código penal para blindar a los políticos de eventuales acusaciones de corrupción.
Guatemala vive un clima de turbulencia política desde que el 25 de agosto la Fiscalía y la Comisión de la ONU contra la impunidad en Guatemala (Cigig) solicitaron levantar los fueros al jefe de Estado para investigarlo penalmente por el presunto delito de financiamiento electoral ilícito.
La situación se agravó dos días después cuando el mandatario pidió la salida inmediata del jefe de la Cicig, el colombiano Iván Velásquez, tras declararlo persona no grata, una medida frenada inmediatamente por la Corte Constitucional.
Aunque el pulseo Morales-Velásquez ha bajado de tono en las últimas semanas, el gobernante no pierde oportunidad para arremeter contra lo que califica como injerencia de la Cicig en los asuntos internos de Guatemala.
(Con información de Prensa Latina)