Italia: la inocencia esclavizada
Roma. Apenas rebasan los 15 años. Muchas tienen menos edad. A todas les sembraron el sueño de ser niñeras, camareras, incluso de exhibir sus cuerpos en una pasarela en la Italia de la moda; muchos son también niños y adolescentes, los más provienen de África.
El hambre y la miseria, el miedo a ser reclutados por grupos armados en perennes conflictos, los compulsan a una ciega aventura que emprenden apoyados de una mano ‘amiga y segura’.
Todos marcados por vejámenes, explotación y abusos sufridos en una larga travesía por tierra y mar, y por deudas impuestas, no contraídas la mayoría de las veces, superior a 30 000 euros por el mero hecho de traerlos a este lado del Mediterráneo y que significa trabajar por tiempo indeterminado para ese ‘benefactor’.
Historias de esperanzas coartadas por el engaño que los arrojan al tráfico de drogas y la prostitución, trabajan para otros, lo mismo en la industria del sexo que en plantaciones agrícolas, bajo amenazas y coacciones.
‘Pequeños esclavos invisibles 2017’ es el título del estudio, reciente presentado por la reconocida ONG Save de Children, el cual expone con crudeza la creciente presencia, signada por un mayor flujo migratorio, de menores víctimas de la trata y la explotación sexual en Italia.
En 2016 fueron 1 172, de ellos 954 mujeres y 111 niños y adolescentes, el 84 por ciento niñas, las víctimas acogidas a programas de protección, señala el texto.
El 67 por ciento del total provienen de Nigeria, la mayoría sometida a la explotación sexual, muchas, según otras fuentes, ‘contratadas’ por redes criminales nigerianas radicadas en Europa.
Este drama lo corrobora un trabajo de las unidades móviles de Save de Children en 2016 y en los primeros seis meses de 2017, el cual muestra un número cada vez mayor de niños de nacionalidad nigeriana y rumana obligados a la prostitución callejera.
El monitoreo evidenció también un aumento significativo de menores de Bangladesh y Egipto e incluso eritreos atrapados en virtud del lento proceso de reubicación.
En una sola noche, la ONG identificó la presencia en las calles de 3 280 personas, víctimas reales o potenciales, entre ellos 167 niños o adolescentes presuntas o víctimas de la trata, pesquisa que abarcó a 50 provincias de 19 regiones.
Los menores no acompañados que llegaron por vía marítima a Italia en 2016 fueron 25 486, el doble de 2015 y en el primer semestre de este año fueron 9 761.
Negocio criminal que mueve en el mundo miles de millones de dólares, el segundo ingreso después del tráfico de droga; en Europa tiene al menos 12 760 delincuentes adultos o sospechosos acusados, de ellos tres mil187 mujeres.
En Italia, aunque las pruebas de campo muestran un número mayor, son 324 los adultos sospechosos o acusados de delitos relacionados con el tráfico o explotación, en su mayoría hombres, de origen rumano 89, nigerianos 85 e italianos 47.
Internet es la vía más utilizada para contratar los servicios sexuales y su publicidad de sus ‘ofertas; las nuevas tecnologías como los teléfonos móviles, son cada vez más importantes tanto en la contratación como en el control de las jóvenes víctimas.
‘Pequeños esclavos invisibles 2017’, documento de 98 páginas en cinco capítulos, muestra datos, imágenes e historias contadas por las propias víctimas.
Save the Children, fundada en 1919, lucha para salvar vidas de niños, hizo su dossier con el fin de ‘restaurar una imagen fiel de la cadena de la delincuencia’ y que sea ‘útil para estructurar un plan de acción política y programática contra este delito aberrante’.
(Coninformación de Semanario Orbe, vía Prensa Latina)