Estudio del Iteso sobre #RedAMLOve está sesgado
La mejor estrategia contra los ataques son las políticas públicas retributivas, un buen gobierno y acabar con la corrupción: Lujambio
El estudio del Iteso sobre la red en Twitter dedicada a atacar a los detractores del presidente Andrés Manuel López Obrador está sesgado, pues evitó el análisis de los grupos en redes que denuestan de forma organizada al mandatario, afirmó el consultor político Alberto Lujambio, quien participó en la campaña en medios sociales para impulsar la candidatura de López Obrador a la Presidencia de México.
En entrevista con El Economista, Lujambio dijo que dado que el laboratorio multidisciplinario del Iteso, Signa Lab, debió aplicar las herramientas presentadas en su estudio sobre la llamada #RedAMLOve a los grupos que en Twitter orquestan ataques contra López Obrador y su gobierno. Al no contar con ésa información, dijo, el estudio acusa un sesgo.
Signa Lab Iteso publicó el estudio Democracia, libertad de expresión y esfera digital. Análisis de tendencias y topologías en Twitter: el caso de la #RedAMLOve, en el que identifica a una red encargada de “ataques y campañas de ridiculización a periodistas, medios de comunicación y usuarios con una postura crítica hacia las acciones del mandatario”, López Obrador.
Alberto Lujambio fue el coordinador creativo de la plataforma Abre Más Los Ojos (cuyas siglas forman la palabra AMLO, como las iniciales del presidente), que durante la campaña electoral de 2018 se encargó de atajar los ataques contra el entonces candidato López Obrador y de difundir documentos como Pejenomics —en el que se explicaba la plataforma económica de Morena— o la historieta que explicaba la propuesta de habilitar a la base militar de Santa Lucía como proyecto alterno al NAIM.
El análisis del Signa Lab sobre el comportamiento de la #RedAMLOve no distinguió la coordinación política de la operación digital, aseguró Lujambio. El consultor explicó que la coordinación exhibida por la #RedAMLOve se entiende porque quienes participan en ésta son personas que llevan años defendiendo sus posturas en las redes sociales y organizándose políticamente, aprendizaje que ahora emplean para “contrarrestar la verdadera campaña difamatoria que se gestó durante la campaña [de López Obrador] y que no se ha terminado”.
La alta aprobación de la que goza el presidente, más los datos que indican que la escolaridad promedio de los usuarios de Twitter es universitaria, son elementos para considerar que el Signa Lab no está entendiendo un fenómeno de organización ciudadana en redes, externó Lujambio. Lo que comenzó como resistencia a los embates de la derecha primero, y que ahora se constituye como una defensa de un proyecto político que aprueban y dan soporte.
Por lo que toca a la polarización y violencia que el estudio del Iteso identifica en las acciones de #RedAMLOve, Lujambio dijo que los responsables de ello en México —y en el mundo— son los partidarios de la derecha radical. Puso como ejemplo la reciente polémica que se suscitó luego de que Ricardo Sevilla denunciara en un artículo que un grupo de empresarios financió a intelectuales para atacar a López Obrador durante la campaña de 2018, cuya coordinación intelectual estuvo a cargo supuestamente del intelectual Enrique Krauze. Según Lujambio, esta estrategia siguió los pasos de las ya ensayadas por grupos de derecha en otros países para atacar a sus adversarios políticos de izquierda.
Lujambio dijo que dado los niveles de aprobación por parte de la población a López Obrador y su gestión es innecesario que desde su gobierno se coordine una operación como la de la #RedAMLOve para atacar a sus detractores. Agregó que la mejor estrategia para que un gobierno de izquierda haga frente a los ataques de la derecha es implementar políticas públicas retributivas, hacer buen gobierno y acabar con la corrupción.
(Con información de El Economista)