Endeuda Peña al país más que presidentes anteriores
Ciudad de México. El gobierno del presidente Enrique Peña Nieto se ha convertido en “el más endeudado de los últimos sexenios” ya que el saldo de la deuda pública aumentó más de 15 puntos al pasar de 33.9 por ciento del producto interno bruto (PIB) en 2012 a 49.1 por ciento en 2016, sostuvo el Centro de Estudios Espinosa Yglesias (CEEY).
Ello reduce la capacidad de las autoridades hacendarias para realizar modificaciones al gasto público y han registrado “una pérdida de confianza considerable”, ya que la deuda registrada cada año ha superado los pronósticos que cada año han hecho al respecto, lo cual calificó como “preocupante”.
Las agencias calificadoras Moody´s, Standard & Poors y Fitch “han señalado ya los riesgos de los elevados niveles de deuda para la economía del país… Mantener el saldo de la deuda en niveles estables es importante, pues de no hacerlo podría repercutir aún más en la confianza de los mercados internacionales”, advirtió el centro.
Cuando concluyó el sexenio de Ernesto Zedillo, el saldo bruto de la deuda fue equivalente al 22.6 por ciento del PIB, es decir menos de mitad respecto al porcentaje que se ha alcanzado con la administración de Peña. Con Vicente Fox la deuda bajó a 21.4 por ciento del PIB y con Felipe Calderón se disparó a 33.9 por ciento, es decir 12.5 puntos porcentuales más, precisó el CEEY en un análisis a cargo de Marcelo Delajara, director de crecimiento económico y mercado laboral de la institución.
“La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) ha subestimado una y otra vez los pronósticos para el saldo de la deuda a lo largo del sexenio. Por ejemplo, en los Criterios Generales de Política Económica de 2014, pronosticó que el saldo de la deuda para 2016 sería de 40.9 por ciento del PIB. En 2014 la estimación fue de 43.3 por ciento, en 2015 fue de 47.8 por ciento e incluso en los criterios para el ejercicio fiscal de 2017, la estimación de la deuda alcanzaba el 48.5 por ciento del PIB. Sin embargo, el saldo de la deuda en 2016 finalmente fue mayor al observado y se ubicó en 49.1 por ciento del PIB”, detalló el informe.
De igual manera en que ha fallado en sus pronósticos sobre la deuda, Hacienda ha errado en sus proyecciones sobre el crecimiento económico del país pero en este caso lo “ha sobreestimado de manera recurrente”, apuntó el CEEY.
El ritmo de crecimiento del PIB en los cuatro años que han transcurrido del gobierno de Peña Nieto sólo ha sido de 2.1 por ciento anual. “Prácticamente idéntico al del gobierno de Felipe Calderón y ligeramente inferior al 2.2 por cuento que experimentó la economía en el sexenio de Vicente Fox. En los tres casos, la tasa de crecimiento fue menor a la que se observó durante el gobierno de Ernesto Zedillo”.
En 2016 calculó que la economía crecería entre 2.6 y 3.6 por ciento, cifras muy por encimas de las finalmente registradas, puntualizó el CEEY.
El crecimiento de la economía nacional se ha vuelto “relativamente independiente” de la afiliación política el presidente en turno y, en cambio guarda una estrecha relación con la evolución de la economía de Estados Unidos”, remarcó. (Con información de La Jornada)