ELN cesará acciones armadas unos días en Colombia
En un intento por descongelar los diálogos de paz con el gobierno de Colombia, la guerrilla ELN anunció un cese de sus actividades armadas los días alrededor de las elecciones legislativas del 11 de marzo.
El gesto fue bien recibido por el presidente Juan Manuel Santos, quien ha pedido coherencia a la que es reconocida como última guerrilla de Colombia país, tras suspender a finales de enero las negociaciones instaladas hace un año en Quito por una arremetida rebelde.
«El Ejército de Liberación Nacional (ELN) realizará un cese de operaciones militares ofensivas, entre el 9 y el 13 de marzo próximos», como una «muestra de respeto» por los votantes, indicó el grupo rebelde en un comunicado fechado el domingo 25 de febrero pero divulgado este lunes.
El grupo guevarista, que según cálculos oficiales cuenta con unos 1 mil 500 combatientes, presentó su anuncio como un intento por retomar las negociaciones, congeladas por Santos luego de una ofensiva rebelde contra estaciones policiales que dejó ocho uniformados muertos y docenas de heridos.
La arremetida ocurrió horas después de que finalizara la primera tregua bilateral en medio siglo de enfrentamiento interno.
«Ese es el tipo de gestos que nosotros estábamos pidiendo», dijo el jefe de Estado este lunes a la emisora LaFM.
Santos ha acusado a los rebeldes de no tener voluntad de paz por la seguidilla de «acciones terroristas» contra la fuerza pública y la infraestructura petrolera.
Han venido «insistiendo (en) que quieren la paz, pero las acciones de ellos iban totalmente en contravía», agregó el mandatario, quien dijo que estudiará el comunicado guerrillero y después tomará «una decisión».
De su lado, la organización insurgente insistió en que se siga desarrollando en la capital ecuatoriana la agenda de seis puntos para superar el último conflicto armado de América.
«Proponemos al Presidente Santos fijar una fecha de inicio del Quinto ciclo de conversaciones y enviar su Delegación de Diálogo a Quito», señaló el ELN en el texto.
El mandatario ha dicho que espera muestras de paz del ELN para reanudar las conversaciones y pactar un nuevo cese al fuego, sin embargo la delegación gubernamental permanece en Colombia.
Nuevo intento para hablar
Expertos en la conflagración colombiana coinciden en la dificultad de negociar con el ELN, alzado en armas en 1964 con inspiración de la revolución cubana, por su estructura federada que concede autonomía militar a sus frentes.
Tanto el gobierno como analistas ponen en entredicho la cohesión de mando de la guerrilla guevarista.
El anuncio del cese de acciones armadas «lo que facilita es que el gobierno se pueda volver a sentar con el ELN en la mesa en Quito, no más que eso», dijo a la AFP Ariel Ávila, analista de la Fundación Paz y Reconciliación.
Ávila aseguró que ahora se abre la posibilidad de que las partes vuelvan a dialogar, aunque indicó que es «muy difícil» que las negociaciones lleguen a buen puerto por el poco tiempo que le queda al mandato de Santos, que entregará el poder en agosto tras dos periodos de cuatro años.
Santos está impedido por ley para presentarse a otro periodo presidencial.
«Tal vez lo único que se logre es un cese bilateral al fuego indefinido», porque «en la agenda no va a haber un avance» por la falta de tiempo del gobierno, apuntó.
Santos busca poner fin a un conflicto armado que en medio siglo ha dejado unas ocho millones de víctimas entre muertos, desaparecidos y desplazados.
Con el ELN, el mandatario pretende alcanzar un pacto similar al firmado a finales de 2016 con las comunistas FARC, ya desarmadas y transformadas en partido político.
Tras ese histórico acuerdo, la ahora Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (FARC) participará en las elecciones legislativas de marzo y en las presidenciales de mayo, en las que los colombianos elegirán al sucesor de Santos.
Los ex guerrilleros tienen garantizados 10 curules en el Congreso, aunque deberán participar igualmente en los comicios, según lo convenido luego de cuatro años de negociaciones en La Habana.
Sectores de derecha opuestos al pacto con las FARC, liderados por el ex presidente y senador Álvaro Uribe, han anunciado su intención de modificar lo convenido en Cuba en caso de llegar a la presidencia.
(Con información de AFP)