Curas y políticos convierten Ciudad de los Niños en un infierno

Salamanca.- Los abusos sexuales y físicos ocurridos contra varios menores de edad en el albergue religioso la Ciudad de los Niños fueron posibles no sólo por la ineficiencia de las autoridades para vigilar lo que ocurre en este tipo de centros, sino también por la complicidad entre los directores de los mismos y grupos políticos, afirmaron especialistas en derechos de la infancia.

Ante estas denuncias, el director de la Ciudad de los Niños y sacerdote, Pedro Gutiérrez Farías, interpuso una denuncia penal contra quien resulte responsable del delito de difamación, por la difusión y publicación de la acusación de que abusó sexualmente y maltrató a infantes.

Pero, Nashieli Ramírez, coordinadora general de la organización civil Ririki Intervención Social, consideró que lo ocurrido en los albergues del sacerdote Pedro Gutiérrez Farías es una muestra de la falta de capacidad del gobierno para monitorear y supervisar lo que ocurre en las estancias infantiles, tanto públicas como privadas.

Dicha falla representa una violación a la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, pero también a diversos convenios internacionales en materia de protección a menores de edad, sobre todo aquellos que se encuentran sin cuidado de sus padres o de algún adulto.

Pero además de lo anterior, lo ocurrido en la Ciudad de los Niños demuestra que «hay un tráfico de influencias terrible en todos los niveles, unas redes de protección hacia quienes están a cargo de este albergue. Las altas jerarquías (religiosas) se juntan con el poder, en una relación donde los pecados se perdonan a cambio de la complicidad».

A lo anterior habría que sumar el que las autoridades suelen «institucionalizar» de inmediato –es decir, internan en una institución de puertas cerradas– a los menores no acompañados por sus padres, y lo hacen por tiempo indefinido y en lugares saturados de niños y con personal no capacitado, cuando dicha opción debería ser siempre la última.

Ramírez destacó que sigue existiendo una gran permisividad hacia los albergues infantiles, derivada de la idea de que «los niños y niñas están mejor ahí que en la calle, donde pueden volverse peligrosos», lo que ayuda a pasar por alto múltiples abusos en dichos centros.

Jenny Haza, directora general de la organización Melel Xojobal, coincidió en que el caso de la Ciudad de los Niños deja ver la falta de herramientas del Estado mexicano para supervisar adecuadamente lo que ocurre en dichas casas-hogar, pero también la complicidad entre religiosos y políticos.

La defensa legal

Julián García, abogado del cura, informó que la agencia siete Ministerio Público (MP) en Salamanca integró la carpeta de investigación 76301, contra quien resulte responsable del delito de difamación, por la difusión y publicación de la acusación de que abusó sexualmente y maltrató a infantes.

“Es una denuncia por hechos, hechos que fueron publicados en los medios, todo en torno a que hay delito de trata de personas y otros donde se atreven a pronunciarse sobre esos hechos”, explicó el abogado.

Agregó que las denuncias y publicaciones periodísticas se realizan sin que existan pruebas de los supuestos abusos sexuales y las vejaciones.

“Se siente muy afectado con todas las publicaciones mediáticas que no han sido buenas y muy criticadas, y sobre todo han publicado hechos que ni siquiera son probados en su totalidad”, argumentó. La querella fue puesta el viernes 28 de julio.

El sacerdote está muy dañado y físicamente está abatido porque no puede concebir las acusaciones que hacen en su contra, sostuvo.

No es justo, ni debe ser así, que algunas personas utilizan a los medios para hacer estas declaraciones”, dijo.

Advirtió que harán lo conducente para que no se hagan declaraciones sin fundamento y sin pruebas.

“Muchos dicen, pero no están probados, tan es así que la autoridad públicamente manifestó que no hay hasta el día de hoy ningún hecho en contra del sacerdote Pedro Gutiérrez”, refirió Julián García.

Añadió que la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) debe deslindar responsabilidades contra quien resulte responsable de la difamación contra el cura y la Ciudad de los Niños.

A pesar de que el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) del gobierno del estado difundió que desde el 12 de julio tomaron el control del albergue, el abogado afirmó que Pedro Gutiérrez sigue al frente de la Ciudad de los Niños.

El religioso es una persona de la tercera edad y él quisiera decir en persona el trabajo que realizó durante 40 años con los niños, refirió.

El abogado dio una rueda de prensa, donde sólo convocó a algunos medios de comunicación, donde presentó a jóvenes que vivieron en la Ciudad de los Niños y que declararon que nunca sufrieron abusos por parte de Pedro Gutiérrez.

(Con información de La Jornada)

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