Advierten presuntos crímenes de guerra de EU en Afganistán
La fiscal de la Corte Penal Internacional (CPI) pedirá autorización a los jueces de este tribunal para abrir una investigación sobre presuntos crímenes de guerra cometidos durante el conflicto armado en Afganistán.
Si la corte acepta esta petición, abrirá una de las investigaciones más complejas y controvertidas de su historia, que podría llevar por primera vez a fuerzas militares estadounidenses a tener que responder ante el tribunal internacional.
«Explicaré a los jueces que existe una base razonable que permite pensar que se han cometido crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad en el conflicto armado en Afganistán», declaró Fatou Bensouda este viernes en un comunicado.
A finales de 2016, la fiscal reveló los resultados de un largo estudio preliminar en el que afirmaba «tener una base razonable para pensar» que las fuerzas armadas estadounidenses, la agencia de inteligencia CIA, los talibanes y sus aliados, así como las fuerzas gubernamentales afganas habían cometido crímenes de guerra.
Soldados estadounidenses podrían haber infligido a «al menos 61 detenidos actos de tortura, tratamientos crueles y atentados contra la dignidad humana en el territorio afgano», declaró entonces la fiscal.
«Al menos 27 detenidos» habrían sufrido el mismo tratamiento, infligido por miembros de la CIA en Afganistán y en países como Polonia, Rumania y Lituania, que ratificaron el Estatuto de Roma, el tratado fundador de la CPI, firmado en 1998 y aplicado cuatro años después, añadió Bensouda.
Tras los atentados del 11 de setiembre de 2001 en Nueva York y en Washington, la CIA recibió la autorización del entonces presidente, George W. Bush, para utilizar los métodos de interrogatorio «mejorados», incluido el «waterboarding», una técnica que consiste en simular el ahogamiento del preso.
Los talibanes podrían haber matado, por su parte, a más de 17.000 civiles entre 2007 y diciembre de 2015, según la fiscal de la CPI. En el mismo estudio preliminar, se revelan las supuestas torturas perpetradas por los servicios de inteligencia afganos y la policía.
¿Estadounidenses en el banquillo?
La CPI es un tribunal destinado a juzgar a los más altos responsables de genocidio, crímenes contra la humanidad y crímenes de guerra, cuando las justicias nacionales no pueden o no quieren hacerlo.
La apertura de una investigación podría llevar por primera vez al banquillo de esta corte a las fuerzas armadas estadounidenses, que dirigen la coalición que derrocó al régimen de los talibanes a finales de 2001. Aunque eso es poco probable, ya que Estados Unidos no ratificó el Estatuto de Roma.
La diplomacia estadounidense ya había rechazado a finales de 2016 los resultados preliminares del informe de la fiscal. También podría ser complicado enjuiciar a las fuerzas gubernamentales afganas, debido a la ley general de amnistía adoptada por el Parlamento en Kabul y aplicada desde 2009.
Afganistán reconoció la competencia de la CPI en febrero de 2003, autorizándola así a investigar los crímenes cometidos a partir de mayo del mismo año.
La petición de autorización judicial «concernirá únicamente a los crímenes (…) presuntamente cometidos en el territorio afgano desde el 1 de mayo de 2003 [o] estrechamente relacionados con la situación en Afganistán cometidos desde el 1 de julio de 2002 en el territorio de otros países vinculados al Estatuto de Roma», precisó la fiscal este viernes.
(Con información de AFP)