Acusan violencia contra iraquíes que huyen de Mosul
Miles de civiles iraquíes que huían de zonas controladas por el grupo yihadista Estado Islámico fueron torturados, detenidos arbitrariamente y ejecutados por grupos paramilitares y fuerzas gubernamentales, denunció este martes Amnistía Internacional.
La organización de defensa de los derechos humanos instó a poner fin a estos ataques, a menudo contra suníes sospechosos de complicidad con el Estado Islámico (EI), ahora que las fuerzas iraquíes se disponen a recuperar la ciudad de Mosul de manos de los yihadistas.
«Después de escapar de los horrores de la guerra y la tiranía del EI, los árabes suníes de Irak afrontan actos brutales de venganza de las milicias y fuerzas gubernamentales, y son castigados por crímenes cometidos por la organización», dijo Philip Luther, responsable de análisis de Oriente Medio de Amnistía.
«No hay justificación para las ejecuciones extrajudiciales, las desapariciones forzosas, las torturas o las detenciones arbitrarias».
«A medida que avanza la batalla para reconquistar Mosul, es crucial que las autoridades iraquíes tomen medidas para asegurarse de que estos abusos no se repiten», concluyó.
La denuncia de Amnistía se basa en un informe elaborado con entrevistas a más de 470 testigos, entre ellos antiguos detenidos, y familiares de víctimas asesinadas, detenidas o desaparecidas, además de funcionarios y activistas.
El informe cita un caso ocurrido en mayo, cuando 12 hombres y 4 menores de la tribu Jumaila que huían de Al Sijir, al norte de Faluja, fueron ejecutados después de entregarse a hombres que llevaban uniformes de la policía federal y el ejército.
En junio, las milicias detuvieron a 1.300 hombres y niños de la tribu Mehemda que huían de Saqlawiya, noroeste de Faluja, y muchos fueron torturados antes de ser entregados a las autoridades locales.
Los supervivientes dijeron que fueron golpeados y privados de comida y agua. A uno de ellos le dijeron que fue una venganza por «la matanza de Speicher», cuando unos 1.700 reclutas militares de la base en esa localidad cercana a Tikrit fueron capturados y asesinados por el Estado Islámico. Treinta y seis hombres fueron ahorcados por su papel en esta masacre.