Se suma ANJ a defensa del Ejército
Al encabezar el quincuagésimo aniversario del Plan DN-III-E, un instrumento operativo militar de auxilio a la población civil afectada por cualquier tipo de desastre, el gobernador Arturo Núñez Jiménez expresó su reconocimiento al Ejército Mexicano, por el respaldo que ha dado a Tabasco en materia de protección civil y de servicio social vía tareas de reforestación.
En el ceremonial militar, efectuado en la explanada del 37 Batallón de Infantería, el mandatario valoró la solidaridad de las Fuerzas Armadas con esta tierra vulnerable a fenómenos hidrometeorológicos, durante las recurrentes inundaciones, y aseveró que su coadyuvancia también ha resultado fundamental en la lucha a favor de la seguridad pública.
Ante el comandante de la Trigésima Zona Militar, Agustín Radilla Suástegui, Núñez Jiménez recordó la oportuna intervención del Ejército en apoyo a los tabasqueños durante la inundación del año 2007, considerada la más grave de la historia, y más recientemente, abundó, en la emergencia por lluvias atípicas registrada en diciembre de 2013 en Centro y luego en Balancán.
Una y otra vez ha estado presente todo el sistema de protección civil liderado por el Ejército Mexicano y la aplicación del Plan DN-III-E, un mecanismo, puntualizó, que es referente mundial en tareas de ayuda a la gente en caso de desastres, ya que a solicitud de gobiernos de otras naciones ha prestado asistencia en zonas afectadas de América Latina, Asia e incluso de Estados Unidos de Norteamérica.
Fuerza de paz y socorro
El jefe del Ejecutivo refirió que este tipo de actividades ha caracterizado a la milicia mexicana como una fuerza de paz y de socorro a la población civil. “Cuando ocurre un desastre –dijo–, ya sea por causa de la naturaleza o por la acción humana, son los primeros en llegar a apoyar a quienes están en riesgo y los últimos en salir, tras la etapa de recuperación y reconstrucción”.
En el evento, en el que se presentó una demostración del protocolo que se sigue una vez que ha sido activado el plan a favor de quienes se encuentran en dificultades, el gobernador Núñez enlistó las acciones prioritarias de las Fuerzas Armadas durante una emergencia.
“Primero, lo fundamental, salvar vidas; segundo, socorrer a la población en riesgo para desalojarla ordenadamente y evitar atropellos o tragedias mayores; tercero, dar alimento y albergue a los afectados; cuarto, garantizar la seguridad patrimonial de las personas; quinto, proporcionar asistencia médica a quienes lo necesiten, y sexto, contribuir en las tareas de restauración”, refirió.
Servir al pueblo sin distingos
En el homenaje a las mujeres y hombres de uniforme militar que han servido a las personas en situación vulnerable, el general Agustín Radilla refrendó el compromiso de la institución de servir al pueblo sin distingos y con todos los medios al alcance.
Radilla Suástegui recordó que este instrumento, aplicado a partir de 1966, consta de cinco puntos básicos relacionados con la búsqueda y rescate de personas; evacuación de comunidades en riesgo; administración de albergues; recomendaciones a la población, y seguridad y vigilancia de las áreas afectadas.
Informó que una vez activado, en coordinación con los consejos estatales y municipales de protección civil, el mecanismo se desarrolla en tres fases que permiten atender de manera inmediata a personas y zonas afectadas: prevención, auxilio y recuperación.
La primera está relacionada con la actualización del atlas de riesgo, monitoreos y alertamientos; la segunda está vinculada con los recorridos terrestres y aéreos para salvaguardar la vida de la gente, y la tercera tiene que ver con la limpieza de las áreas dañadas, reparación de caminos, y el restablecimiento de servicios públicos.
