¿PRI paralelo? Reinventar o sepultar al tricolor en Tabasco
(Columna invitada) El ex gobernador Manuel Andrade Díaz presentó la intención de conformar un “frente amplio opositor”, con priistas, pero fuera del PRI
Daniel Castro Jiménez
En 1998 Andrés Manuel López Obrador, Héctor Argüello López, Juan José Rodríguez Prats y José Eduardo Beltrán Hernández intentaron por vez primera en Tabasco conformar un Frente Amplio Opositor, con la clara intención -en ese entonces- de competirle al PRI de Roberto Madrazo.
La calidad de los convocantes nunca estuvo a discusión y aunque el ejercicio sólo duró dos años y se desintegró en el 2000, luego de los desacuerdos internos entre “grillo loco” y el hoy Presidente de la República; fue la primera ocasión en que Tabasco buriló la posibilidad de acuerdos políticos, fuera de la esfera de poder.
Por ello me llamó la atención la opinión que el ex gobernador Manuel Andrade Díaz emitió en días pasados en su opinión semanal (ahora es columnista), en la que además de confirmar mediante una crítica aguda su distanciamiento personal con Alejandro Moreno Cárdenas, presentó la intención de conformar un “frente amplio opositor”, con priistas, pero fuera del PRI.
Guardando las distancias, la convocatoria confirma desde luego la intención del ex gobernador por pulverizar lo que queda del tricolor en Tabasco.
Desde hace algunas semanas, después del mensaje de los “chantajes” de Moreno Cárdenas en la toma de protesta de Dagoberto Lara, se conoció de reuniones que el ex mandatario sostuvo con ex legisladores encabezados por Jorge Lazo Zentella y un grupo de ex alcaldes de ese partido.
Andrade es especialista en invención de “PRI paralelo”. Algo similar ejecutó después de su primera elección en el año 2000, teniendo a la cabeza a la temible “abeja africana”, Joel Cárdenas Arronis.
De hacerse efectiva esta convocatoria, sumaría a ex alcaldes, ex diputados federales y un ex gobernador más que le colocaría el “rejón de muerte” al tricolor.
La extensión del llamado sin embargo considera a ex militantes del PVEM, del desaparecido Movimiento Ciudadano y perredistas que destacaron como representantes populares en el quinquenio del ex gobernador Andrade.
La duda desde luego en esta propuesta es si la intención de un movimiento de esta naturaleza es desaparecer al PRI tabasqueño de la contienda electoral del 2021 o pugnar por espacios dentro de ese partido mediante un acuerdo político.
Queda abierta la incógnita si la intención podría ser el de colocar piezas en los 17 municipios del Estado, para la gran definición del 2024, en caso que el PRI y el PRD muerdan el polvo finalmente durante el proceso intermedio.
Surge la pregunta obligada: si es una contrapropuesta al PRI de Alejandro Moreno, o realmente se busca la intención de considerar una segunda intención de convocar a un “Frente Amplio Opositor”, de cara a las elecciones que vienen bajo el argumento de buscar soluciones a los grandes problemas de Tabasco.
Mayor duda refleja el cuestionamiento: ¿De dónde saldría el financiamiento para ello?
KYBALIÓN. Serios los cuestionamientos de Javier López Cruz contra Ariel Cetina Bertruy, titular del Ifortab en Tabasco.
Obliga desde luego a la Secretaría de la Función Pública (SFP) a realizar una investigación sobre el manejo de recursos en esa dependencia para deslindar responsabilidades.
Cetina Bertruy tenía más de un año desaparecido de eventos públicos, nadie sabía dónde despachaba; tiempo en el cual curiosamente la agrupación “Sociedad en Acción” organizó su proceso de solicitud como partido político.
Reapareció en “La Marcha de la Lealtad” y fue vapuleado en redes sociales. Ayer el PRD le puso el dedo.