Exhibe CIMAC fiasco del Estado en protección a periodistas

Villahermosa. La creación del mecanismo de protección a periodistas y defensores de derechos humanos es el reflejo de la dimensión de violencia que viven estos y del fracaso del Estado para garantizar la libertad de expresión, sostuvo Lucía Lagunes Huerta, directora de Comunicación e Información de la Mujer, Asociación Civil (CIMAC) en entrevista en el marco del VII Encuentro de la Red Nacional de Periodistas.

Entrevistada en relación a ese tema y la creación de mecanismos estatales con el mismo objetivo que el federal, la periodista y feminista, mencionó ante el consejo consultivo y el presidente Enrique Peña Nieto, la posición de Cimac ha sido muy clara: no creemos que los mecanismos locales puedan funcionar.

Y lo sostenemos porque hemos comprobado que la mayoría de los agresores de periodistas son agentes del Estado, es decir, gobernadores, funcionarios públicos municipales, estatales o federales, entonces un mecanismo que no tiene independencia, que ha sido creado por un gobernador poco puede proteger.

De acuerdo a la Ley de Protección a Periodistas y Defensoras de Derechos Humanos, creada en el 2012,  dijo, la federación está obligada a crear un mecanismo y generar vínculos con las entidades federativas  para garantizar los principios de la ley, es decir no se necesita de la creación de mecanismos estatales.

El organismo federal puede emitir recomendaciones a las entidades para que las ejecute, además de que periodistas y defensores o defensoras prefieren que sea la autoridad la que realice la protección en los estados, por la desconfianza en autoridades estatales.

Algo muy grave, destacó, es que los mecanismos de protección a periodistas y defensores que se han creado en algunos estados, no disponen de personal capacitado para realizar los análisis de riesgo que son fundamentales, si estos dictaminan poco riesgo para una persona, derivará en un bajo perfil de protección y en consecuencia las posibilidades de agresiones son muy altas.

Los análisis de riesgo, no son cualquier cosa, disponer de una metodología para elaborarlos ha costado muchísimo, abundó.

Todo parece indicar que en las entidades federativas no se ha considerado eso, dijo Lagunas Huerta, así que se corre el riego de lo sucedido con otras instancias creado a nivel federal y luego llevadas a los estados.

Un ejemplo de eso son las agencias especializadas en delitos sexuales, en la ciudad de México se instalaron cinco y una en cada estado pero sin personal capacitado, por lo tanto hubo lugares en los que solo se instaló una mesa para declarar-

Entonces,  me parece que ese es el riesgo en las entidades federativas cuando no hay seguimiento y compromiso y cuando la federación no tiene una injerencia directa para proteger a esos periodistas

Insisto, la creación del mecanismo es el reflejo de la dimensión de violencia que vivimos los periodistas y defensores en México y del fracaso del Estado mexicano para garantizar la libertad de expresión, en lugar de que los periodistas podamos ejercer nuestro trabajo libremente.

La directora de Cimac (organización madre de la Red Nacional de Periodistas y otras redes como la Red Internacional de Periodistas con Visión de Género), en el marco del VII Encuentro nacional de Periodistas que tuvo lugar en la ciudad de Oaxaca a mediados de este mes, reflexionó:

Si la Fiscalía para Atender Delitos contra la Libertad de Expresión, que se creó hace diez años, realmente hiciera su trabajo, de sancionar a los responsables de las agresiones a periodistas, no solo a los actores materiales sino intelectuales de las mismas, otra sería la situación.

En muchos países está comprobado que cuando la impunidad se cierra, la violencia disminuye.

En el 2010, el Relator de la Libertad de Expresión en México Frank La Rue dijo que la impunidad es la puerta abierta a la repetición y también que en México esa situación se acabaría, y las y los periodistas mexicanos llevamos siete años confirmando esa frase y lo que se convirtió en una mentira, agregó.

(Con información de Cecilia Vargas/La Verdad del Sureste)