CCE insiste en limitar el combate a facturas falsas
El punto precisamente es que todos los empresarios entiendan que no es un asunto menor el coludirse con delincuentes para no pagar impuestos
El ejemplo cunde, ahora el presidente del CCE, Carlos Salazar Lomelín, dice que está muy preocupado por los pequeños contribuyentes que podrían ser confundidos con delincuentes organizados en empresas fantasma o emisoras de facturas falsas.
Su buen corazón lo lleva a considerar que sería bueno, verdad, si se pudiese, introducir a través del Código Fiscal de la Federación algunas precisiones para evitar confusiones como las enunciadas arriba, en perjuicio de microempresarios.
Todavía no les queda claro que las reformas en materia de combate a empresas fantasma y facturas falsas establecidas ahora en la ley, no aplica para quienes no forman parte de una estructura criminal.
Si queda claro que la ley aprobada por el Congreso la semana pasada y enviada al Ejecutivo federal para su publicación sí equipara la defraudación fiscal con la delincuencia organizada y está dirigida precisamente a quienes participen de una cadena o círculo para no pagar los impuestos correspondientes.
Los grandes empresarios quieren que se establezca que a esta ley no está sujeto un contribuyente que ha declarado impuestos y ha contribuido al erario, sino (que es) para quien se organiza y genera una estructura de delincuencial.
Pero la ley es muy específica:
Se considerará delincuencia organizada cuando participen al menos tres contribuyentes y el daño al erario sea superior a 7,804,230 pesos. Pues a como yo lo veo, más claro ni el agua pura.
El CCE y sus representados piden nada más y nada menos sólo será aplicable a los grupos de personas que se organicen para delinquir de manera permanente y reiterada, con lo cual dejaría la puerta entreabierta para los alegatos de los abogados de la defensa.
Tanto la Ley Federal contra la Delincuencia Organizada, la Ley de Seguridad Nacional y los códigos Nacional de Procedimientos Penales, Fiscal de la Federación y Penal Federal se enfocan en equiparar el uso de facturas falsas o la operación de empresas fantasma como una amenaza a la seguridad nacional.
Y ese es el punto precisamente, que todos los empresarios entiendan que no es un asunto menor el coludirse con delincuentes para no pagar impuestos.
Aprovechamos esta primera colaboración para Total Sapiens para agradecer la oportunidad de llevar a sus seguidores los comentarios relativos a las finanzas y la economía, porque en este mundo material lo primero es el dinero.