La falta de neutralidad en Internet
Como en muchas otras áreas, México tiene en Telecomunicaciones leyes bastante avanzadas pero cuya falta de aplicación en la práctica cotidiana produce el quiebre de la neutralidad en la red, tal como lo señalan algunas publicaciones.
Aunque la ley ordena que los proveedores de servicios de internet, fijo o móvil, proporcionen el acceso respetando la capacidad, la velocidad y la calidad que se haya contratado por parte de los clientes, independientemente del contenido, origen, destino y el equipo o aplicaciones utilizados, la realidad es muy distinta.
Al menos así lo establece la ley en función de la reforma en telecomunicaciones.
Sin embargo, cualquier usuario puede dar incontables y hasta cotidianas señales de qué tan deficientes son los servicios que proporcionan los proveedores y operadores.
América Móvil, con Telcel y Telmex, empresas dominantes del mercado, o Televisa, con izzi, así como otros competidores fijos inalámbricos o móviles, como Axtel, AT&T y las muchas cableras regionales, registran quejas de todo tipo día tras día.
Desde que la velocidad que obtienen los usuarios no es sino una fracción de lo contratado, o que el servicio simplemente no está disponible o se cae constantemente.
Otro ejemplo de violación a la ley es la práctica llamada “zero-rating”, que es más común entre las telefónicas móviles, y que consiste en la oferta paquetes con acceso ilimitado a redes sociales.
En específico, es cuando una firma, Telcel, por ejemplo, permite a sus usuarios la reproducción gratuita de videos de Facebook o Twitter, pero no los de YouTube o alguna otra plataforma.
Por otro lado, hay prácticas más sutiles que apelan a la ingeniería social.
Por ejemplo, hay proveedores de servicios de internet que obligan a los usuarios a tener tal o cual equipo para tener la calidad de acceso contratada. O también hay ciertas firmas de internet (Google y MSN, sobre todo) que impiden que los servicios de competidores se desplieguen con eficiencia.
Aquí, la mayoría de los usuarios simplemente compran sin cuestionar el equipo “recomendado” por los proveedores, inclusive en tiendas de su propia marca, o acceden a tal o cual buscador sin cuestionar o sin darse cuenta de que es víctima de una especie de boicot cibernético.
Por ello, a pesar de que la neutralidad de la red se ha discutido seriamente en varias arenas (desde la legislativa hasta los muchos foros convocados por reguladores y autoridades así como la propia industria), México figura entre las economías emergentes más fuertes que cayeron en el más reciente Reporte Global de Tecnologías de la Información del Foro Económico Mundial (WEF).
Lo malo es que a pesar de lo avanzado en cuanto al papel, la gente percibe que el ambiente regulatorio se ha deteriorado, sobre todo en la eficiencia del sistema legal para resolver disputas
En próximas colaboraciones daremos a conocer más prácticas abusivas de los presuntamente “neutrales” proveedores de servicios o fabricantes de software y hardware como teléfonos, computadoras y tablets.