Denuncian persistencia de estereotipos de género en los medios
Las escuelas de periodismo son espacios altamente feminizados, pero esto no se refleja dentro de la estructura laboral: Nelly Lara Chávez
En los medios de comunicación persisten roles y estereotipos de género, sin embargo, “hemos encontrado alternativas que provienen, sobre todo, del movimiento feminista, para desarticular este tipo de prácticas”, indicó la profesora de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS) de la UNAM, Nelly Lara Chávez.
Recordó que desde la década de 1970 el tema sobre las mujeres y los medios de comunicación ha sido tratado con la intención de promover una reformulación de contenidos y mensajes de éstos, de modo que reflejen una realidad coincidente con lo cotidiano, la trayectoria y los roles profesionales y personales, no sólo de los varones, también de ellas.
Al participar en la sesión VIII Igualdad y violencia de género en los medios de comunicación y redes digitales, del V Seminario Internacional Permanente Política Pública de Género: Igualdad y Violencia 2023, señaló que en 1990 se vislumbró que en el mundo las escuelas de periodismo y comunicación son espacios altamente feminizados, es decir, la mayoría de quienes cursan estudios de comunicación son mujeres.
Sin embargo, “esto no se refleja dentro de la estructura laboral, pues por lo general los jefes o quienes dirigen ciertos equipos de trabajo son varones, eso es algo que ha llamado nuestra atención”.
En el encuentro virtual organizado por la Escuela Nacional de Trabajo Social (ENTS) de la UNAM, la académica señaló que, al egresar de la carrera, una parte importante de mujeres se inserta en estos espacios laborales y, aun llegando a ellos, no terminan de alcanzar los mandos de toma de decisiones, lo que “ha provocado grandes reflexiones sobre qué ocurre con la estructura interna de los medios de comunicación, cómo operan para que no terminemos de insertarnos en esta estructura laboral”.
Como resultado de ello, dijo, se han encontrado muchas cuestiones interesantes del por qué las mujeres terminamos marcando una distancia con respecto a la estructura mediática. Por ejemplo, en México muchos empresarios u hombres que ocupan puestos directivos al interior de los medios convocan a reuniones el viernes a las 12 de la noche en un club o en un bar para tomar decisiones.
“Esas prácticas patriarcales son algunos de los aspectos que se han rastreado sobre cómo operan los medios de comunicación y por qué a las mujeres se nos dificulta estar presentes en estas estructuras que plantean dinámicas que, de entrada, pueden ser violentas para nosotras y en horarios que también se vuelven complicados”, prosiguió.
Nelly Lara Chávez destacó que la estructura de los medios sigue marcada desde esas visiones masculinas, y para no caer en esos vicios y prácticas patriarcales, las mujeres debemos fomentar nuestro ingreso con dignidad.
Planteó que las evaluaciones continuas de la plataforma de acción de Beijing (septiembre de 1995) –programa donde se definen acciones a realizar la potenciación del papel de la mujer–, “nos sigue permitiendo advertir que aún nos falta mucho por hacer en términos de erradicar los estereotipos a nivel mediático en el mundo, así como para que las mujeres nos incorporemos a los medios de comunicación”.
En ese contexto, apuntó, cada vez hay más mujeres laborando en los medios, podemos encontrar directoras, editoras, tomadoras de decisiones, sin embargo, en relación con los hombres en esas posiciones, “seguimos siendo una minoría dentro de la estructura de los medios de comunicación”.
Por otra parte, resaltó que un aspecto en el que el género femenino ha avanzado menos en el ámbito global, a partir de las evaluaciones de Beijing, es como propietarias de los medios de comunicación. Según estimaciones de esa plataforma, en el mundo sólo un 0.04 % de mujeres son propietarias de los medios, “no llegamos ni al uno por ciento de dueñas de algún medio, me parece que ahí tenemos precisamente los ejes de lo que falta por hacer”.
Expuso que en los medios de comunicación altamente comerciales todavía no existe una conciencia de género, seguimos viendo cómo se replican los estereotipos y roles de género, así como contenidos sexistas y androcentristas.
En la actualidad han surgido medios de comunicación que se posicionan como feministas y cuyo objetivo es desarticular y criticar esto que se sigue reproduciendo en los medios tradicionales. Hoy, por ejemplo, tenemos estaciones de radio feministas en Ciudad de México, así como periódicos y revistas independientes que tienen esta idea de no seguir reproduciendo ni las temáticas que plantearían los medios tradicionales, ni la representación de las mujeres de forma tradicional, finalizó.
(Con información de Gaceta UNAM)