Mejor seguridad y justicia con estrategia de Sheinbaum
Propone consolidar Guardia Nacional, coordinación con fiscalías y policías estatales, atender causas de inseguridad y reformar el PJF
Ciudad de México. La candidata de la coalición Sigamos Haciendo Historia, Claudia Sheinbaum, presentó su estrategia de seguridad y justicia, en la cual destaca que buscará la consolidación de la Guardia Nacional, una coordinación que incluya a las fiscalías y policías estatales, atención a las causas de la inseguridad y una reforma al Poder Judicial.
De ganar la Presidencia, aseguró que los índices de delitos se reducirán cada año, y rechazó que la frase abrazos, no balazos esté dirigida a los delincuentes. Los abrazos son para las y los jóvenes.
Sheinbaum estuvo acompañada por quienes coordinan los temas en su campaña: Omar García Harfuch, Ernestina Godoy y Arturo Zaldívar.
La Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana y la reducción de delitos en la capital durante su gobierno fueron las dos herramientas principales que usó para fortalecer sus argumentos de que la estrategia presidencial funciona.
Al respecto, sostuvo que entre enero y mayo de 2018 y el mismo periodo de 2023 los homicidios dolosos bajaron 18 por ciento.
De mantenerse la tendencia de los sexenios anteriores, aseguró, en lugar de bajar los asesinatos hubiesen crecido 30 por ciento. En el caso de la capital, insistió en que logró una reducción de 58 por ciento en delitos de alto impacto.
A su vez, García Harfuch habló de replicar en el resto del país lo que resultó en la Ciudad de México, de otorgar facultades de investigación a las policías estatales, de coordinación e inteligencia para que las acciones de gobierno no deriven en más violencia.
Mejorar el medio ambiente
Mas tarde, en Tula, Hidalgo, se comprometió ante miles de personas en la explanada de la presidencia municipal, entre ellos trabajadores petroleros y del Sindicato Mexicano de Electricistas, que de ganar la contienda dedicará buena parte de tiempo y del presupuesto a mejorar las condiciones ambientales del país, que se ha quedado rezagado pese a ser la decimosegunda economía del mundo.
Sheinbaum estuvo acompañada por los senadores Ricardo Monreal, el pevemista Manuel Velasco y César Cravioto, quien es delegado de Morena en la entidad, así como de candidatos a legisladores en un evento en el que escuchó demandas de los asistentes, como la construcción de un hospital y que el agua que reciben sea potable.
Asumió que va lento el tema del río, por lo que tenemos que entrar a un proceso de descontaminación del afluente, de la refinería y otras fuentes contaminantes que hay en el municipio. Recordó que como secretaria del Medio Ambiente en la Ciudad de México se dedicó muchos años a ese tópico.
Se comprometió a regresar como presidenta electa, traer un plan para combatir el problema ambiental y establecer una mesa de trabajo para atender éste y otros puntos, como la construcción de una universidad y evaluar si se puede edificar un hospital.
En Tula, Hidalgo, la morenista sostuvo que es necesario disminuir las fuentes de contaminación que afectan la zona. En su plan de seguridad, la panista insistió en construir una cárcel de alta seguridad para los capos. Fotos Cristina Rodríguez y Roberto García Ortiz
En ese acto un grupo expresó su descontento por la selección de candidatos en Hidalgo; Sheinbaum les pidió tranquilidad y les dijo que sus colaboradores los atenderían; a los interesados en puestos de elección popular comentó que el poder sólo es virtud cuando se pone al servicio de los demás. Somos servidores públicos y estamos al servicio de pueblo. De eso se trata la Cuarta Transformación.
Los inconformes portaban cartulinas contra la imposición en Tezontepec. Entre consignas de ¡presidenta¡ ¡presidenta! y es un honor estar con Claudia hoy, la candidata insistió en que consolidará las grandes obras de infraestructura del actual gobierno.
Las posturas de Bertha X.
Xóchitl Gálvez, candidata presidencial de la coalición Fuerza y Corazón por México, presentó 15 propuestas en materia de seguridad, entre las que incluye convocar a un acuerdo nacional por la paz y sacar a los militares de cualquier actividad civil. Su apuesta sería recuperar el territorio con inteligencia, apoyo de la Guardia Nacional y del Ejército, pero no será la guerra de Calderón.
Para presentar su proyecto, convocó a una conferencia en la que afirmó: no es mi intención dañar al Ejército y su reputación, pero no es su papel tener líneas aéreas ni administrar trenes. Tiene otro papel demasiado digno. Lo que es de los civiles, a los civiles; lo que es de los militares, a los militares.
Se le insistió en si espera que las fuerzas armadas den su beneplácito para dejar aduanas, aeropuertos y trenes asignados en el actual sexenio, a lo que respondió: los generales de los contratazos, no, pero la tropa de los trancazos estaría encantada de regresar.
(Con información de La Jornada)