La mayor transa de litio en México, se dio en dos pasos
De la estimación inicial de 4.5 MDT del mineral, se pasó a 17 mil 500 toneladas anuales en la primera fase (2024) y 35 mil en la segunda
Ciudad de México. La concesión para explotar el mayor yacimiento de litio en México, ubicado en el estado de Sonora, fue otorgada durante el gobierno de Felipe Calderón por 100 años.
La recibió un particular en 2010 y luego fue vendida en 2013, ya en la administración de Enrique Peña Nieto, a la firma Bacanora Lithium, según información oficial.
A partir de la aprobación de la Ley Minera la semana pasada, que reserva para el Estado la propiedad sobre ese recurso estratégico, se abre la puerta a una revisión que, en este caso, involucra a una empresa china que tiene derechos sobre su explotación, de acuerdo con los datos oficiales.
El mayor yacimiento de litio en México conocido hasta el momento y catalogado como el prospecto con el mayor depósito de mineral del mundo, será explotado por compañías extranjeras hasta el año 2115.
Sin embargo, el presidente Andrés Manuel López Obrador ha planteado que con la aprobación de la reforma a la Ley Minera se realizarán revisiones a las concesiones entregadas a particulares.
Datos oficiales indican que el Proyecto de Litio de Sonora, que pertenece a la inglesa Bacanora Lithium y próximamente a la china Ganfeng Lithium, cuenta con siete concesiones mineras en el municipio de Bacadéhuachi, las cuales tienen un alcance de alrededor de 8 mil hectáreas. La mayoría de estas licencias tienen vigencia de 50 años, lo que significa que vencerán en 2065.
No obstante, la Ley Minera establece que toda concesión puede extenderse por otro periodo similar, lo que significa que, de solicitarlo, la explotación de ese yacimiento podría ser controlado por la empresa china o por alguna otra que pague por ella, dado que las concesiones pueden ser traspasadas, hasta el año 2115.
No obstante, ese tiempo sería insuficiente para terminar de extraer el litio que se presume contiene el yacimiento sonorense, pues de acuerdo con un estudio de viabilidad distribuido entre sus inversionistas, Ganfeng Lithium estima que los recursos de carbonato de litio de esa mina ascienden a 8.8 millones de toneladas, por lo que se necesitarían 250 años para agotarlos por completo.
Más de lo esperado
Dicha cifra supera la divulgada en 2019 por Mining Technology, que al declarar al yacimiento de Sonora como el depósito de litio más grande del mundo reveló que éste contenía 243 millones de toneladas de reservas probadas y probables, mismas que tenían 4.5 millones de carbonato de litio equivalente, es decir, el mineral que realmente se puede aprovechar para comercializarlo.
Estimaciones de Bacanora Lithium (actual propietaria del yacimiento), indican que su planta en Sonora tendrá la capacidad de procesar inicialmente alrededor de 1.1 millones de toneladas de mineral por año, para en una segunda etapa llegar a 2.2 millones.
Esto arrojará una producción de 17 mil 500 toneladas anuales de carbonato de litio en la primera fase (segundo semestre de 2024) y de 35 mil en la segunda (no especifica fecha).
Diversos especialistas y organismos como la Cámara Minera de México han señalado la dificultades del proyecto, pues el litio que contiene el yacimiento se encuentra en arcilla y por el momento no es posible extraerlo de una manera viable; no obstante, Ganfeng ha señalado que el de México es su proyecto más importante y tiene la capacidad de producir el mineral en poco tiempo a un costo bajo.
Lo anterior, enfatizó Violeta Núñez, investigadora de la Universidad Autónoma Metropolitana, da la impresión de que dicha empresa ya cuenta con la tecnología necesaria, o está cercana a ella, que es, quizá, la razón por la que decidió ingresar a México.
“La entrada de esta empresa asiática se debe a los cálculos que tiene sobre la riqueza de litio en México. Tan sólo del Proyecto de Litio de Sonora, Ganfeng indica que es uno de los proyectos de recursos de litio más grandes del mundo. Lo que evidencia el gran potencial del país, aunque claro, también se deben sumar las diversas condiciones que han permitido un intenso extractivismo en México, entre ellas la Ley Minera vigente, que da un poder absoluto a las empresas mineras”, apuntó.
(Con información de La Jornada)