A votar pensando en el bien común y la paz: Obispos
Ciudad de México. En vísperas de las elecciones del próximo 1 de julio, los obispos de la provincia eclesiástica de Chiapas confiaron en que ocurra un “proceso verdaderamente democrático”.
Rodrigo Aguilar Martínez, obispo de San Cristóbal de Las Casas, Fabio Martínez Castilla, arzobispo de Tuxtla Gutiérrez y el presbítero, Arnulfo Quintanar Monroy, administrador diocesano de Tapachula, propusieron que al votar, “no moverse por el interés o la ganancia personal, sino ejercer la responsabilidad ciudadana procurar el bien común y la paz que se fundamenta en la justicia”.
También dijeron que al sufragar se debe pensar “en el bien de la gente, en el respeto a la naturaleza y en las generaciones futuras”.
Tener presente que “el bien común consiste en las condiciones que permiten al ser humano desarrollar su vocación de persona y de creyente” y que esto implica “el respeto a la persona humana y sus derechos inalienables”.
Coincidieron que en Chiapas “se ha deteriorado la dignidad de la actividad política, al convertirla en ocasión de acceso a los recursos públicos para el enriquecimiento personal, familiar o de grupo”.
Expusieron que lamentablemente “muchos presidentes han endeudado a sus municipios, desviando el presupuesto, sosteniendo las campañas de sus partidos e, incluso, distribuyendo en efectivo los recursos del presupuesto, reforzando el ciclo de la pobreza y la dependencia”.
Aseguraron que “es evidente el enriquecimiento ilegal y voraz de numerosos funcionarios, en contraste con los deficientes servicios públicos que deberían beneficiar a la población”.
Dijeron que existe una “corrupción presente en los diferentes sectores de la sociedad, pero que tiene su principal raíz y manifestación en numerosas entidades gubernamentales”.
Los jerarcas subrayaron que “el pueblo percibe que las reformas estructurales y la política neoliberal han resultado en mayor costo de la gasolina, el gas, la electricidad, la canasta básica; y en el deterioro de los servicios de salud y la educación”, entre otros servicios. Denunciaron que hay “caciques políticos que se han centrado en el beneficio de su familia, o imponen sus propios candidato”.
Además sostuvieron que “es de dominio público que hay funcionarios y candidatos con historial delictivo (proliferación de la droga, las cantinas, trata de personas), que cuentan con protección de funcionarios gubernamentales”.
Expusieron que el sistema de partidos políticos ha sido causa de “divisiones y conflictos” y denunciaron que existe “compra de votos, coacción por los programas sociales, propaganda engañosa, promesas falsas, distribución de despensas y otros objetos para condicionar al votante”.
Asimismo “se constata la intervención de la delincuencia organizada en la selección o imposición de candidatos y la existencia de grupos armados ilegales al servicio de intereses políticos, económicos o criminales”.
“Ante esta realidad, nuestra responsabilidad como pastores es estar siempre al servicio del pueblo, para acompañarlo desde la fe en su búsqueda de bienestar y liberación de todo lo que daña su vida”.
(Con información de La Jornada)