Veteranos y nietos en la era digital educativa
“Soy de la idea que es sano, desde el punto de vista de la psicología, regresar a la escuela para reactivar el proceso educativo natural”, dijo Edgar Correa
OLD PARR.
Después de revisar los resultados escolares con datos de la SEP a nivel nacional y local y en coincidencias con padres de familia cercanos, puedo asegurar sin ligereza ni mala fe que el ciclo escolar 2020-2021 en todo el país, se perdió.
Dando por hecho que fue un año perdido para los estudiantes de escuelas públicas y colegios privados, vale la pena buscar alternativas, no para recuperar el tiempo perdido que es imposible, si para evitar mantener la misma tendencia de retraso y ampliar los caminos para el aprendizaje continuo.
En mi caso particular, terminé una carrera profesional, ejercí varios cargos y oficios, incluido el de periodista, desde reportero hasta editorialista, de lo cual me siento muy orgulloso, aunque no afortunado, pero, el cargo más importante que me toca ejercer al concluir la última etapa de mi vida es, sin duda, el de abuelo.
Considero que una tarea que podríamos realizar los abuelos (saludos Raúl Ojeda) en esta época de pandemia y confinamiento, de enseñanza sin maestros y aprendizaje sin alumnos, es el mantener con los pies en la tierra a nuestros nietos, alejarlos de la realidad virtual que los somete a una nueva forma de esclavitud y los mantiene alejados de nuestras costumbres. tradiciones, cultura y valores.
CUERVO ESPECIAL.
No se trata de que nos carguen la mano nuestros hijos dejándonos a los nietos en edad de cuidados, sino armar un proyecto educativo emergente en lo que se regularizan las clases presenciales para que los nietos en un rango de 5 a 12 años, se nutran de la experiencia que dan los años, siguiendo la teoría educativa del cognitivismo (Bruner, Novak, Noam Chomsky, Neisser, Bandura), teoría que asegura el aprendizaje se produce a partir de la experiencia.
Un abuelo, en el mejor de los casos, es sinónimo de experiencia y de manera excepcional, de sabiduría, que se desaprovecha como se desaprovechan las escuelas sin alumnos desde hace más de un año. Un abuelo puede enseñar a sus nietos a sembrar y a cosechar, a realizar tareas domésticas, el manejo de herramientas, lectura en voz alta, juegos infantiles tradicionales, entre otras cosas, uno o dos días a la semana dependiendo del tiempo disponible. Yo le entro.
LA CAMINERA.
Sobre la urgencia de abrir las escuelas, el doctor José Edgar Correa Terán, de la UPN en Jalisco me dijo hace un mes:
“Es un hecho que el presente ciclo escolar se terminará con el trabajo a distancia o virtual, lo cual da margen para que el gobierno junto con la sociedad civil y padres de familia planifiquen las estrategias para regresar a clases el próximo mes de agosto y con ello comience el ciclo escolar 2021-2022.
“Soy de la idea que es sano, desde el punto de vista de la psicología, regresar a la escuela para reactivar el proceso educativo natural.
“Las únicas recomendaciones serían ejecutar los protocolos sanitarios como los determinan las autoridades, es decir, instalar filtros, máximo uno o dos días de clases presenciales a la semana, mantener la sana distancia en los salones de clase, atención a grupos reducidos (máximo 9 alumnos), evitar las aglomeraciones, y, sobre todo, continuar con el trabajo a distancia o virtual que llegó para quedarse”. Sea por Dios.
