Juego democrático disparejo por la dirigencia de Morena

La militancia que se la rifó con AMLO desde su inicio sirve para votar, y los que se colaron por la puerta de atrás… para gobernar

SÁBADO ELECTOBAR. La competencia democrática sólo es posible entre iguales. El Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) con autorización del INE, pretende en una encuesta pagada por los mismos que promueven a los aspirantes oficiales, definir al nuevo presidente y secretario general del Comité Ejecutivo Nacional (CEN). Para taparle el ojo al macho se inscribieron más de medio centenar para uno y otro cargo, con el fin de que los perdedores sean suficientes en número para legitimar los resultados, acallar los reclamos y levantarles la mano a los candidatos oficiales. ¿Dónde vi esto antes?

Como quien no quiere la cosa, políticos de cepa, se colaron al Morena y le dieron matatoncha a los morenistas tradicionales, antiguos priistas que vienen rodando desde el Frente Cardenista y el PRD al lado de López Obrador. En la política choca a esta maroma se le conoce como mama luna, un vuelta y vira polaco para darle continuidad a la Cofradía del Hueso Perpetuo. En Morena se maneja un principio efectivo: la militancia que se la rifó con AMLO desde su inicio sirve para votar, y los que se colaron por la puerta de atrás cuando al nopal le brotaron tunas, sirven para gobernar.

Los morenistas de a pie siguen las instrucciones de los de a caballo que muy listos ya tienen palomeado a su candidato a dirigente nacional desde hace un año. Es más, ya lo vi, se parece mucho a Mario Delgado Carrillo, tiene ojos avispados, pelo lacio, usa camisas a cuadros del tiradero de Liverpool, mueve la ceja izquierda al estilo Pedro Armendáriz, parece diputado federal a lo lejos, y de cerca huele a coordinador de la bancada.

Dicen que es carnal de Marcelo y que cantan en el mismo teatro, creo que hasta tienen un pacto escondido ¿Y quién no lo tiene? Según las crónicas de sociales, cuando vino de gira a Tabasco hace un año, el gobernador le levantó la mano como el mero mero para dirigir los destinos del partido oficial y recientemente lo volvió hacer, ya en la etapa de la encuesta.
Ante tan morbosa y descarada cargada en todos los estados del país, los demás aspirantes no tienen mucho que hacer, el aspirante oficial circula por todo México en campaña con los gastos pagados por el erario disfrutando de los reflectores que lo siguen por el cargo que ostenta.

Ante esta simulación democrática que se puede oler desde lejos, el candidato oficial lleva todas las de ganar, tiene los dardos cargados a favor y es dueño del Casino. Bajo estas condiciones eas muy difícil que en vez de Mario, el más correoso resulte ser Alejandro Rojas Díaz Durán, quien ayer estuvo en Tabasco con la muchachada informativa dispuesta a contraer el coronavirus con tal de recabar la noticia.

Alejandro es el único de los aspirantes que no tiene cargo alguno en que apoyarse para sostener financieramente su campaña para la dirigencia nacional como lo tienen los demás aspirantes. En su larga carrera política ha participado en diversas campañas electorales en apoyo directo a López Obrador, Marcelo Ebrard, Ricardo Monreal, entre otros. Es el único que conoce y congenió con Obrador desde que era dirigente estatal del PRI y gobernador de Tabasco don Enrique González Pedrero. Rojas anunció que mañana domingo tomarán las instalaciones del INE porque no ha cumplido con los principios y normas que definen la democracia, y exigió piso parejo y reglas claras.

En la lista de más de 50 aspirantes al CEN de Morena también están: Porfirio Muñoz Ledo a quien descartan por su edad, aunque es una jugada maestra de Bertha Luján. Yeidckol Polevnsky, quien luce bastante quemada, no tiene voz, pero que tal el estilacho, diría La Doña. Gibrán Ramírez Reyes, un joven muy listo, aviador en la UNAM, con sueldo extra de 150 mil pesos mensuales de una entelequia financiada por el IMSS llamada Conferencia Interamericana de Seguridad Social (CISS) de donde utiliza dinero y personal para su campaña.

Por la secretaría general que es el segundo cargo importante en Morena, hay más de 50 tiradores y pasa lo mismo, la propuesta oficial es Antonio Attolini, ex dirigente del movimiento juvenil #YoSoy132. Attolini es del grupo de muchachos que hicieron bulla y se colocaron en buenos puestos en organismos autónomos donde se vive requetebién sin dar golpe.

A pesar de todos estos inconvenientes que muestran una simulación democrática en la elección de la nueva dirigencia nacional de Morena al no ser una lucha entre iguales, en la cancha se notan Mario Delgado, Alejandro Rojas y Yeidckol. Pordiositosanto.