Desear el mal no revierte el mal que nos hacen… o hacemos
Esta mañana fui al banco y sin querer escuché la plática de 2 señoras, ya sé que no es mi problema, pero entre esa conversación y varios memes que se publican aquí en Facebook, entiendo un poco por qué estamos tan jodidos.
La señora -a quien no vi porque yo estaba sentada en la primera fila y ella en la segunda- le dijo a la otra: pero ya verás cómo le va, porque todo lo que aquí se hace, aquí se paga, nadie se va debiendo.
He leído varios mensajes, memes o frases sobre eso y por eso me surge la duda: ¿en verdad tenemos que recurrir a desearle mal a alguien para sentir consuelo? ¿en verdad nos alegra que a tal o cual persona le vaya mal para que pague el mal que nos ha hecho?
Entonces, si tuviéramos la oportunidad de dañar o lesionar a quien nos lastimó o nos afectó ¿Qué le haríamos? Tal vez habría miles de tuertos, mancos, inválidos, ciegos y cualquier cantidad de lisiados en pago por dañarnos.
¿será que está en nuestra naturaleza buscar venganza o revancha cuando nos sentimos heridos? ¿nos es tan difícil perdonar, o por lo menos no desearle mal a los demás?
Supongo que así ha sido a lo largo de la historia humana, pero ahora todo se agrava gracias a las redes sociales que replican tanto cosas positivas como negativas.
En fin, esa es mi inquietud, por eso la Oración de Hoy es por todos los que deseamos la desventura o tristeza de otros, por los que nos alegramos cuando sabemos que tal o cual persona tiene dificultades, para que nos demos cuenta de que eso no hace más que ponernos un lastre.
Te pido, Señor, que seamos más solidarios y empáticos y dejemos de perder el tiempo esperando que los demás paguen por lo que nos hacen, porque nosotros también -con intención o sin ella- podemos y hacemos daño a nuestro prójimo.
¡¡Amen y amén!!