PRI y PRD pretenden engañar a los electores… otra vez
Los aspirantes a la candidatura presidencial, José Antonio Meade Kuribreña (JAMK), por el PRI y Miguel Ángel Mancera Espinosa (MAME) son elegidos por presuntamente no militar en los partidos que los postulan.
Esta presunción ha sido repetida hasta la saciedad en los medios oficialistas nacionales y locales sin el menor recato, cuando la realidad es que uno y otro son más priistas o perredistas que los propios militantes de dichos partidos.
Si bien, esta ‘pertenencia’ no se da en el ámbito de los ideales o principios, sí se ha dado en ambos casos en cuanto contubernios y acuerdos por debajo de la mesa, es decir en la aprobación de las prácticas y políticas públicas instrumentadas desde el poder por el tricolor y los solazatequistas.
Se entiende que la propaganda intenta, al igual que con los supuestos candidatos ‘independientes’, restarle a Mancera y Meade la percepción negativa que la sociedad ha desarrollado ante el pésimo ejercicio del poder federal y el citadino.
Uno esperaría que la sociedad mexicana ya haya aprendido de la evidente historia del latrocinio priista-panista-perredista de los últimos 17 años al menos, de lo contrario, el daño con Meade o Mancera seguirá en perjuicio de la mayoría de los mexicanos.
En la acera del Frente (Ciudadano) se ubica el panista, Ricardo Anaya Cortés, quien ha resistido los ataques tanto de los esbirros del gobierno federal como del grupo calderonista-albiazul que pretende aferrarse al poder a como dé lugar.
Intencionalmente dejamos para el final al aspirante de Morena, Andrés Manuel López Obrador, cuyo mayor enemigo (algo que también se ha repetido inveteradamente) es él mismo pues, no mide las consecuencias de sus palabras que pueden ser y son manipuladas sin pudor alguno por la prensa oficialista.
Por lo pronto, como siempre, la sociedad es la que tiene la última palabra, a menos que haya sorpresas computacionales como en el pasado o en otros países como Honduras.
Ya dije.
