Nada cambió con la salida de Videgaray
No me sorprende el tono de festejo de la mayoría de los medios de comunicación ni la proliferación de memes y cartones en las redes sociales ante la salida del priista Luis Videgaray Caso de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.
Como si ese solo hecho cambiara por arte de magia la realidad nacional, los precios de las gasolinas bajaran, se echaran atrás las fracasadas reformas, se incrementara o se distribuyera mejor la riqueza nacional; pero no, no ha sido así ni lo será.
Los que entran seguirán con las mismas políticas. Tan sencillo como que el presupuesto para el 2017 fue elaborado por el ahora ex titular de SHCP y el entrante sólo se limitará a presentarlo al Congreso.
Nada ha cambiado, los que ahora salen tomarán unas vacaciones con el dinero que han obtenido de las arcas nacionales y luego… luego vendrá el proceso electoral de 2017, escenario previo a la renovación de los poderes federales de 2018.
Los pobres a los que con tanto ahínco decía ayudar el multi chambas José Antonio Meade, experto en todo, fueron abandonados, ahora defenderá la exacción vía impuestos, de los magros ingresos de los más jodidos, de los medianamente jodidos y exonerará a los más ricos.
El fracaso económico seguirá, el endeudamiento continuará en perjuicio del PIB y habrá recortes en áreas esenciales para la sociedad y las familias, pero esto parece no importarle a nadie, la gente ha “comprado” la idea de que la renuncia de Videgaray es una especie de castigo, cuando lo que único que ha hecho el presidente Enrique Peña Nieto, es asegurar la impunidad de su amigo y hasta le confiere una especie de victimización.
Qué pena con estos medios de comunicación, que mal por tanto estulticia, qué difícil es contrarrestar las versiones oficiales y su reproducción infinita en twitter, facebook, google+, instagram, whatsapp…