Sanciones económicas sin aval de ONU SON ilegales
La resolución de la ONU del 23/11/2021 prohibe coercionar a un país para que subordine el ejercicio de sus derechos soberanos
La Habana, Cuba. Las llamadas disposiciones coercitivas unilaterales, de las que tanto se habla en la prensa mundial, son una antigua arma de la guerra económica entre los Estados que en la actualidad han sido declaradas ilegales por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) si no cuentan con la aprobación del Consejo de Seguridad de ese organismo global.
Sin duda, el Grupo de los 77 más China se anotó una gran victoria cuando el pasado 23 de noviembre, en la Segunda Comisión de la Asamblea General, se adoptó la Resolución “Medidas económicas unilaterales como medio de coerción política y económica contra los países en desarrollo”.
La Resolución, aprobada con 117 votos favorables frente a la abstención de 47 delegaciones y la oposición de seis, dictamina que “ningún Estado puede aplicar o fomentar el uso de medidas económicas, políticas o de cualquier índole para coaccionar a otro Estado a fin de lograr que subordine el ejercicio de sus derechos soberanos”.
Luego de permanecer durante 22 meses en la agenda de la Segunda Comisión sin que hubiese acuerdo de la mayoría de cara a refrendarlo, el documento acordado “exhorta a la comunidad internacional a que condene y rechace la imposición de tales medidas, y solicita se adopten urgentes y eficaces disposiciones para impedir su aplicación”.
Previamente, el 14 de agosto de 2021, el consejo ejecutivo de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América – Tratado de Comercio de los Pueblos dio a conocer su rechazo a las medidas coercitivas unilaterales porque “evidencian el carácter intervencionista de un Estado que transgrede las disposiciones del derecho internacional y la Carta de las Naciones Unidas”.
Una guerra histórica como antecedente
Los orígenes de ese tipo de medidas se remontan a una fecha tan antigua como el año 432 antes de nuestra era, en el transcurso de la llamada Guerra del Peloponeso, cuando regía en Atenas el célebre político Pericles, quien suscribió el decreto bajo el cual se impusieron sanciones económicas al pueblo de Megara, aliado de Esparta en aquel conflicto entre los dos principales estados griegos.
En los tiempos actuales, las disposiciones coercitivas unilaterales han sido empleadas ―en un elevado número de ocasiones― por las Administraciones norteamericanas con el objetivo de castigar a los Gobiernos que se oponen a sus intereses extraterritoriales
En la lista de países sancionados por la Casa Blanca se encuentran los pertenecientes a distintas regiones, como son Siria e Irán, del Medio Oriente; y Venezuela, Cuba y Nicaragua, de América Latina y el Caribe.
(Con información de Prensa Latina)