Persiste desigualdad pese a disminución de la pobreza
San Luis Potosí. “Me da pena decirlo”, pero en nuestro gobierno, los banqueros han tenido las mayores ganancias “porque nunca se había reducido tanto la pobreza como ahora”, y tampoco hay un empresario “de los grandes” que haya fracasado, al contrario “han aumentado hasta el doble su fortuna”, aseguró el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Acompañado por la virtual presidenta electa en el acto “Balance económico sobre desarrollo industrial y T-MEC”-, resaltó que su política económica “se está apoyando de abajo hacia arriba, primero a la base de la pirámide social. Somos 35 millones de familias en el país y es un orgullo poder decir que 30 millones están recibiendo aunque sea una pequeña porción del presupuesto público”.
Los cinco millones restantes, “que no reciben de manera directa ese apoyo también se benefician, porque si hay ingresos abajo, la gente tiene capacidad de consumo, compra lo básico y hasta lo no básico y se benefician el comercio y la industria”, agregó.
El mandatario subrayó que “a todos los mexicanos les está yendo bien” con ese modelo, donde el presupuesto se distribuye con justicia, “que es darle más al que tiene menos”, a diferencia de lo que llaman política neoliberal, que era “absurdo”.
En el Centro de Convenciones potosino afirmó: “no hay un empresario de los grandes que haya fracasado, al contrario, todos han tenido utilidades y hay empresarios que con su trabajo y con su capacidad empresarial, creando empleos de manera legal, han aumentado hasta al doble su fortuna.
“Los banqueros, me da hasta pena decirlo, pero en el gobierno nuestro, el año pasado, este año, es cuando más ganancias han tenido los bancos en toda la historia de México. ¿Saben por qué lo digo? Porque tengo también la gran satisfacción de poder decir que en toda la historia moderna nunca se había reducido la pobreza en México, como lo estamos haciendo ahora”.
Indicó que con Sheinbaum esto va a continuar y “es bienestar para el pueblo. Primero, que no le falte a la gente lo más indispensable, los mínimos de bienestar”.
Señaló que se debe continuar “con la aspiración de hacer realidad el Estado de bienestar, que el mexicano tenga seguridad desde que nace hasta que muere” y no le falte derecho al trabajo, a la salud, a la educación, a todos los satisfactores básicos”.
Indicó que eso “lo sabe muy bien, y lo ha llevado a la práctica muy bien la próxima presidenta. Ella habla de que la educación, la salud no son mercancías, no son privilegios, son derechos del pueblo”.
También mencionó que es importantísima la inversión pública, “que habían olvidado los tecnócratas… Cuando llegamos al gobierno eran 500 mil millones y el año pasado fue un billón de pesos, el doble. Eso genera mucho empleo”.
En este acto, la división entre simpatizantes del gobernador Ricardo Gallardo y morenistas fue patente. Ambos grupos fueron separados en el salón, aunque prevalecieron los que portaban playeras verdes, algunas con las leyenda ¡Gracias AMLO!, acompañada de un amlito y la imagen de un pollo -apodo con el que es conocido el gobernador.
Como ha ocurrido en otros actos similares o incluso en campaña, los dos bandos se enfrascaron en una confrontación de consignas. De un lado “pollo, pollo”; del otro, “somos libres, no acarreados”.
En algún momento, simpatizantes de Gallardo pretendieron sacar a unos cuantos de Telesecundaria que exigieron el pago de pensiones. Al no lograrlo, intentaron tapar con camisetas las cartulinas.
(Con información de La Jornada)