¿Existe vida en otros planetas?
Los científicos utilizan diversos modelos, como los fotoquímicos o el cálculo de la temperatura de las atmósferas, dice astrobióloga
Saber si existe vida en otros planetas, incluso los que se ubican fuera del sistema solar (exoplanetas), es una de las preguntas abiertas de la ciencia, en especial de la astrobiología, que estudia el origen, evolución, distribución y futuro de la vida en el universo.
“Nuestra idea de la habitabilidad planetaria está basada en la vida terrestre, que de manera general requiere de la química del carbono y de agua líquida, resumió Antígona Segura Peralta, astrobióloga del Instituto de Ciencias Nucleares (ICN).
En entrevista, explicó que el carbono es un elemento químico que puede unirse hasta con cuatro átomos al mismo tiempo, incluyéndose a sí mismo, el cual es capaz de formar estructuras muy grandes que pueden tener estructuras complejas. “Para que estas moléculas se encuentren, reaccionen y se acumulen se necesita un medio líquido, que en la Tierra es el agua”, precisó.
Dijo que si pensamos en los lugares en donde se forman los planetas, que son las nubes moleculares en las que se acumula material de las últimas fases de las estrellas, en aquéllas también el carbono y el agua son comunes.
“Los planetas alrededor de las estrellas enanas M o enanas rojas son potencialmente habitables. El problema con ellas es que tienen actividad cromosférica, consistente en que emiten grandes cantidades de radiación de rayos X, radiación ultravioleta y a veces repentinamente hay una subida de todo esto. Tienen una muy elevada radiación de rayos X y esto podría ser dañino para la vida; por eso hay un debate científico al respecto”, explicó la científica.
Los planetas están muy cerca de estas estrellas enanas M, que son menos masivas, poco luminosas, con discos en los que se forman los planetas poco masivos. “La zona habitable, que es este lugar donde podrían haber planetas potencialmente habitables, la podemos muestrear con instrumentos que tenemos ahora”, comentó.
Por ejemplo, si pensamos en la Tierra y el Sol, que están a una unidad astronómica de distancia, necesitaríamos muestrear por lo menos un par de años antes de observar a nuestro planeta ya sea por el método de tránsito o el de velocidad radial, que son los dos más comunes.
Detectar planetas en la zona habitable de estrellas como el Sol es técnicamente más complicado que hacerlo alrededor de estrellas enanas M. Esto es lo que las ha hecho buenas candidatas para buscar, pero tienen sus problemas también, añadió Segura Peralta.
“Entendemos muy bien que la vida puede formarse a partir de compuestos totalmente inorgánicos, que estaban allí como metano, dióxido de carbono, hidrógeno, nitrógeno, los cuales seguramente están disponibles en otros planetas, como lo estuvieron en Marte, por ejemplo.
Se necesitan también algunos metales, como fósforo, y a partir de esto se empiezan a organizar las moléculas. “También hubo procesos completamente aleatorios a partir de cosas que estaban en el ambiente”, dijo.
Los detalles de cómo surgieron exactamente las primeras células todavía son oscuros, pero tenemos una idea muy clara de que a partir de ciertas situaciones geológicas y ciertas materias primas, la vida surgió en la Tierra, agregó la experta.
“Estos contextos geológicos podrían suceder en otros planetas, porque planetas hechos de rocas, de silicato como la Tierra, podrían suceder en otros mundos. La cuestión es que no sabemos con qué probabilidad”, afirmó.
Experimentos teóricos y observacionales
Las y los científicos hacen simulaciones teóricas mediante códigos numéricos. “Tienen una serie de ecuaciones que salen de leyes físicas o reacciones químicas. Mis modelos en particular simulan cómo entra la radiación y cómo van sucediendo todas las reacciones químicas por la radiación de la estrella a partir de suponer ciertas cosas. Yo estoy suponiendo que mi planeta tiene una atmósfera de dióxido de carbono y nitrógeno, como era la Tierra al principio, como son Marte y Venus, y luego veo qué pasa cuando inyecto una cantidad de radiación ultravioleta proveniente de una de estas estrellas. Veo qué reacciones químicas suceden y esto me permite predecir qué cosas puedo ver en planetas alrededor de otras estrellas”, detalló.
Para estudiar la habitabilidad, Segura Peralta utiliza modelos fotoquímicos, pero otros colegas calculan la temperatura de las atmósferas y el escape atmosférico, es decir, qué pasa si se va la atmósfera, que es muy importante para la habitabilidad, porque permite mantener agua líquida en la superficie. En general son modelos teóricos.
También hay modelos experimentales en los que se puede poner una mezcla de gases en un matraz, y someterlo a diferentes fuentes de energía. Otros experimentos se hacen con bacterias extremófilas, que pueden sobrevivir en diferentes ambientes, para probar los límites de la vida.
(Con información de Gaceta UNAM)