Egipcios coptos sudan la camiseta contra la discriminación
Vistiendo con orgullo una camiseta azul decorada con un balón y una corona con una cruz, jóvenes jugadores coptos se activan con entusiasmo bajo el sol abrasador de Alejandría, la gran ciudad portuaria al norte de Egipto.
De 15 a 27 años, estos futbolistas amateurs se entrenan en la única cancha en la que son aceptados, la de la academia ‘Je Suis’ (en francés ‘Yo soy’), que trabaja con los jóvenes cristianos que sufren discriminación en un país mayoritariamente musulmán.
«Jugaba en un club de Alejandría y me pidieron que cambiase a un nombre ‘musulmán'», explica a la AFP su fundador, Mina Bandari, cuyo nombre está muy extendido entre los coptos, nombre con el que se conoce a los cristianos de Egipto.
«El problema se repitió en varios clubes, lo que me llevó a dejar de jugar y concentrarme en la resolución del problema de los cristianos en el fútbol de Egipto», explica este joven de 22 años.
La academia, que celebrará su tercer aniversario en junio, acoge cristianos «sea cual sea su nivel» y que «son rechazados por los equipos simplemente por sus nombres», añade.
Entre ellos, Mina Samir, centrocampista de 17 años, que causa un entusiasmo particular.
«No tiene parangón», exclama su entrenador, que le ha bautizado como ‘Cristiano’ por su parecido con el delantero portugués del Real Madrid Cristiano Ronaldo.
Tras unas pruebas convincentes con un «conocido club», el entrenador preguntó a Samir cómo se llamaba. «Su entusiasmo desapareció y me dijo: ‘Ya te llamaremos'», dijo a la AFP. Nunca recibió esa llamada.
Su familia le aconsejó entonces abandonar su sueño. «El fútbol no está hecho para nosotros, más vale que te concentres en tus estudios», le llegaron a decir.
Mayor que sus compañeros, Mina Choukri Ismaïl en un farmacéutico de 27 años, de barba negra poblada pero bien recortada. Recuerda para la AFP su tranquila infancia pasada en un barrio musulmán. «No llego a entender esta intolerancia en el fútbol», confiesa. «Al final todos somos egipcios».
Objetivo de los islamistas
Es también la opinión de Bandari, que desea formar un equipo de cuarta división, abierto a los musulmanes porque, tal como precisa, «no se trata de una sedición sino de un rechazo del racismo».
La selección nacional y los grandes clubes del país no cuentan con ningún jugador copto, pese a que esta comunidad representa un 10% de un total de población estimada en cerca de 100 millones de habitantes.
Víctimas de discriminación en los puestos altos de la administración, los coptos han sido últimamente el objetivo de sangrientos ataques perpetrados por la organización Estado Islámico.
Capitán de los Faraones -apodo del equipo nacional- a finales de los años 1990, Hani Ramzi, que llegó a jugar en Europa, sigue siendo el único futbolista copto conocido de su país.
«¿Es normal que en la historia del fútbol egipcio no haya habido más que cinco jugadores cristianos de alto nivel?, se preguntaba el exinternacional Ahmed Hossam, alías ‘Mido’, en el canal privado DMC el mes pasado.
‘Mido’ denunció también que los coptos no son las únicas víctimas de racismo en el fútbol egipcio.
La exestrella del Ajax, Tottenham, Marsella o Zamalek también reaccionó a los comentarios racistas contra el jugador Ali Ghazal, de tez más morena al proceder del sur del país, después de la publicación en las redes sociales de una foto del jugador con su hija mestiza. Los estadios de Egipto están llenos de «personas muy racistas que no se esconden», denunció.
Algunos tratan de luchar contra este fenómeno, como Mohamed Khalifa, entrenador de un pequeño club al norte de El Cairo. «Tres jugadores cristianos y ocupan puestos importantes en el terreno de juego porque tienen talento», explica a la AFP.
Para el técnico, las causas de esta discriminación no son religiosas, sino relacionadas con la «falta de comprensión y de aceptación del otro».
Magdi Abdel Ghani, exjugador y miembro importante de la Federación Egipcia de Fútbol, niega la existencia de una discriminación hacia los cristianos en el fútbol. «Lo primero que aprendemos en cualquier federación es ‘¡No al racismo!'», asegura a la AFP.
(Con información de AFP)
