‘Descubre’ BM importancia de la infraestructura educativa
El diseño debe impulsar una educación inclusiva, adecuada y efectiva, según el artículo publicado por el Banco Mundial
En América Latina y el Caribe enfrentan una crisis de aprendizaje, la cual ha sido exacerbada por la pandemia de Covid-19.
No sólo hay una necesidad de tener más escuelas para atender al creciente número de estudiantes, sino también hay una necesidad de escuelas mejor construidas que promuevan la recuperación del aprendizaje.
En medio de la creciente incidencia de desastres provocados por peligros naturales en la región, la evidencia muestra que la infraestructura escolar puede contribuir a mejorar los resultados educativos, así lo considera un artículo publicado en la página web del Banco Mundial.
El documento “Así es como una mejor infraestructura educativa puede apoyar la recuperación de aprendizajes en América Latina”, escrito por: Enrique Alasino, Juan Carlos Atoche y Juan Pablo Fuentealba Álvarez, establece que la infraestructura de buena calidad puede contribuir a una mayor inclusión, seguridad y prácticas pedagógicas efectivas.
Consideran que para asegurar que la infraestructura apoye eficazmente el aprendizaje, las autoridades deben tener en cuenta tres conceptos:
- Ser inclusiva: garantizando el acceso a los niños más vulnerables debido a su situación económica y/o social, género o discapacidad.
- Ser adecuada: garantizando que se cumplan las condiciones básicas de seguridad, como la temperatura, calidad del aire, iluminación e higiene, junto con la resistencia a los choques externos como inundaciones y terremotos.
- Ser efectiva: facilitando diferentes prácticas pedagógicas para lograr los objetivos de aprendizaje de habilidades del siglo 21, como la colaboración y el trabajo en equipo, a través de espacios flexibles.
Los autores establecen 3 estrategias:
- Crear políticas que posicionen la infraestructura como un recurso educativo para acelerar el aprendizaje… Cuando los estudiantes tengan acceso a Internet, el aprendizaje será más versátil y el profesor solo podría convertirse en un facilitador en las escuelas virtuales, utilizando herramientas adaptativas.
- Recopilar datos para identificar dónde se concentra el riesgo y luego crear planes de inversión basados en un análisis de riesgos que priorice la protección para los más vulnerables contra el cambio climático y otros peligros naturales.
- Colaborar con todas las partes interesadas para garantizar que los edificios escolares estén alineados con la pedagogía tanto en diseño, construcción como mantenimiento. Las inversiones en infraestructura escolar nueva y existente deben estar reguladas por estándares arquitectónicos adaptados al contexto local y alineados con las prácticas pedagógicas. La definición de la normativa debe ser el resultado de un esfuerzo colectivo en el que participan equipos educativos y arquitectos para asegurar que los diseños, el currículo y las prácticas pedagógicas van de la mano.
(Con información de El Economista)