Arte y cultura sujetos al mundo de la economía
Se requieren reformas administrativas y laborales para que los artistas sean reconocidos como sujetos de derecho: Andrea Salmerón
Andrea Salmerón, directora escénica y audiovisual, afirmó que es necesario establecer reformas constitucionales para que las personas que conforman la esfera artística y cultural del país puedan apostar por modelos económicos independientes.
“Si queremos depender un poco menos de las instituciones públicas, tenemos que exigirle al Estado que cumpla con su labor vinculante para promover reformas legislativas que son urgentísimas, precisamente para que podamos ir teniendo mayor independencia y sostenibilidad”, expresó durante su participación en la mesa de diálogo Economía y el Trabajo Artístico, primera del foro Las Artes Escénicas y Performativas Puestas a Prueba, organizado por la Cátedra Internacional Inés Amor en Gestión Cultural.
En la mesa moderada por Juan Meliá, director de Teatro UNAM, y en la que intervinieron también José Antonio Cordero, director escénico y cinematográfico, y Eleno Guzmán, artista escénico y gestor cultural, Salmerón explicó que se requieren reformas tanto administrativas como laborales a fin de que las y los artistas sean reconocidos por el gobierno como sujetos de derecho, garantizándoles el acceso a la seguridad social y a una mejor calidad de vida.
Además, refirió que para poder hablar de sustentabilidad en las artes escénicas, estas reformas deben establecer un régimen fiscal único y específico para los actores culturales, con el objetivo de que puedan mantener sus utilidades, las cuales generarían ahorros y así podrían desprenderse de los estímulos gubernamentales.
“No nos da ningún derecho, pero sí nos cobran todos los impuestos que pagan las empresas. Eso nos imposibilita mucho poder tener tanto una utilidad como mejores condiciones no sólo de trabajo, sino de vida”, dijo la también gestora.
Por su parte, José Antonio Cordero, miembro del Movimiento Colectivo por la Cultura y las Artes en México, señaló que el gran problema para la sostenibilidad de las artes escénicas se fundamenta en la brecha entre la visión creativa y la comercial, “son víctimas de la paradoja entre las dinámicas de creación y las dinámicas de consumo”, y comentó que para una eficaz sostenibilidad será necesario apostar por los vínculos identitarios de una comunidad, a fin de que esta misma participe también en la financiación de los proyectos.
Nuevas tendencias
En la segunda mesa del foro, dedicada al tema Nuevas Tendencias Artísticas en las Poéticas de la Escena, tomaron parte los artistas Evoé Sotelo, directora de Danza UNAM; Claudio Valdés Kuri, director de la compañía Teatro de Ciertos Habitantes, y Alicia Laguna, codirectora de Teatro Línea de Sombra; con la conducción de Raissa Pomposo, coordinadora de la Cátedra Extraordinaria Gloria Contreras en Estudios de la Danza y sus Vínculos Interdisciplinarios.
El cuerpo ha generado rupturas y avances insólitos en el ámbito del arte, opinó Sotelo, y en ese sentido es indispensable reconsiderar sus discursos en el contexto de la pandemia.
“Encontrándonos en el espacio del confinamiento, hay que replantearse las formas de mediación del cuerpo para construir una narrativa, ya que no estábamos habituados a este tipo de mediación digital tan persistente. También hay que reformular el concepto de presencia en la producción artística de los cuerpos, un concepto que se redimensiona a través de esta mediación digital”.
Valdés Kuri expresó que el medio digital, como cualquier otro, también puede adquirir posibilidades poéticas y artísticas, todo depende de la decisión, la capacidad y la inspiración de quien lo use.
Sin embargo, aclaró, él sigue prefiriendo que su discurso sea presencial. “Hicimos un festival virtual y me di cuenta que la experiencia, por más buena que sea la transmisión, da cuenta de pocas sensaciones con respecto a lo que se vive en un teatro. Además, yo confío que la gente va a querer presencia, que va a haber más gente en los teatros”.
(Con información de Gaceta UNAM)
