Víctimas de la catástrofe de Bhopal sucumben a covid 19
El Bhopal Memorial Hospital se negaba a recibir a personas consideradas no positivas a la covid-19, aun cuando presentaban síntomas
Víctimas de la mortífera fuga de gas en la ciudad india de Bhopal, en 1984, mueren ahora del coronavirus tras haber sufrido durante años las consecuencias de una de las peores catástrofes industriales del mundo.
En diciembre de 1984 en la fábrica de pesticidas Union Carbide de la ciudad de Bhopal (centro), un escape de 40 toneladas de gas causó la muerte de 3 mil 500 personas en pocos días. En los años siguientes, otras 25 mil personas murieron como consecuencia de esta catástrofe.
Hoy, muchos de los entonces afectados representan una proporción significativa de las personas fallecidas por el nuevo coronavirus en Bhopal: al menos 20 del total de 45, según cifras del gobierno.
Naresh Khatik, de 52 años, era uno de ellos. Su hijo, Gaurav, de 20 años, explicó a la AFP que su padre padecía lesiones pulmonares desde la catástrofe.
El Bhopal Memorial Hospital and Research Centre (BMHRC), un establecimiento pionero dedicado a los pacientes que padecieron las consecuencias de esta fuga de gas tóxica, rehusó aceptarlo.
Situado en las afueras de la ciudad, este centro fue requisado en marzo por el gobierno del Estado de Madhya Pradesh para tratar a los enfermos del virus.
Pero el hospital se negaba a recibir a personas consideradas no positivas a la covid-19, aún cuando presentaban síntomas, según los críticos de este centro.
Los demás establecimientos médicos también rehusaron cuidarlos, pues el personal sanitario alegó que no tenía el material necesario para tratar enfermedades relacionadas con la catástrofe.
«Si no se hubiera producido semejante confusión en torno al Bhopal Memorial Hospital, mi padre seguiría sin duda en vida» afirma Khatik.
«Pesadilla»
Son muchos los que acusan al gobierno de haber abandonado a las víctimas de la catástrofe, muy vulnerables al coronavirus debido a su frágil salud.
«Hemos alertado que si no se tomaban medidas para protegerlos, muchas víctimas de la fuga iban a morir de la covid-19… Pero no nos han hecho caso», se lamenta Rachna Dhingra, del grupo de acción e información de Bhopal.
Igual que Khatik, Gulnaz, una mujer de 35 años, vivió «una pesadilla» cuando su suegro Riyazuddin, que sufría problemas pulmonares desde la catástrofe, se quejó de dificultades respiratorias.
«Hemos tenido que pelear», explica, y afirma que cuatro hospitales, entre ellos el BMHRC, rechazaron aceptar y cuidar a este hombre de 65 años.
Finalmente ingresó al hospital público Hamidia, donde fue controlado positivo al covid. Pero «murió durante la noche», relata Gulnaz, que solo da su nombre de pila.
Para un alto responsable sanitario de Bhopal, Faiz Ahmed Kidwai, «se ha confirmado sólo un caso de paciente rechazado» en un centro hospitalario.
Traumatismo
Más de 35 años después de la catástrofe, esta ciudad de 1,8 millones de habitantes sigue traumatizada.
Según estadísticas del gobierno, al menos 100.000 personas que vivían cerca de la fábrica son víctimas de enfermedades crónicas, especialmente problemas renales, respiratorios o cánceres.
El grupo estadounidense ha entregado 470 millones de dólares según un acuerdo que data de 1989, pero ello ha permitido indemnizar solamente a unas 5.000 personas, según las asociaciones.
El director del departamento encargado de las víctimas de esta tragedia, Ved Prakash, declaró que ahora se efectúan pruebas de detección térmica a las víctimas de la catástrofe que presenten síntomas del virus.
Pero, para él, estas pruebas corren el riesgo llevarse a cabo «demasiado tarde» si se realizan «cuando ya hay síntomas».
(Con información de AFP)