Recrudecen protestas contra la barbarie en Colombia
El terror afecta fundamentalmente a líderes sociales, jóvenes, campesinos, indígenas, mujeres, excombatientes y grupos LGBTQ
La Habana, Cuba. Colombia sufre una escalada de violencia agravada en las últimas semanas por la brutalidad policial, lo que a juicio de la senadora Victoria Sandino, del Partido Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (FARC), es síntoma de la crisis estructural que asola a su país.
El terror afecta fundamentalmente a líderes sociales, jóvenes, campesinos, indígenas, mujeres, excombatientes y personas de grupos de diversidad sexual, advirtió Sandino en entrevista exclusiva con el semanario Orbe.
Recordó que el pasado 8 de septiembre en Bogotá, dos agentes de la Policía Nacional inmovilizaron mediante 13 descargas eléctricas al abogado Javier Ordóñez antes de conducirlo a un Comando de Atención Inmediata, donde le propinaron 40 golpes que le ocasionaron nueve fracturas en el cráneo y varias lesiones adicionales.
‘Debido a la golpiza, Ordóñez llegó sin signos vitales a la clínica a la que fue trasladado’, denunció la senadora del partido FARC, al referirse al hecho que desató en la capital de la nación suramericana una ola de protestas que fueron fuertemente reprimidas.
‘La noche del 9 de septiembre la Policía Nacional perpetró una masacre que dejó 13 personas asesinadas, 220 víctimas de violencia física, 70 heridos de bala y 150 lesionados por otro tipo de elementos’, afirmó la legisladora al recalcar que su país está sumido ‘en una profunda y gravísima crisis de derechos humanos que tiene en jaque la vida y la integridad de los y las colombianas’.
De enero a la fecha, Colombia reportó cerca de 57 asesinatos colectivos, lo que evidencia un aumento exponencial en esta clase de crímenes, ‘llegándose a registrar hasta tres masacres en un mismo día’, agregó.
A su vez, alertó que desde la firma del Acuerdo de Paz en 2016 perdieron la vida violentamente más de 1 000 líderes sociales y comunitarios, pero igualmente son ‘perseguidos quienes dejamos las armas y firmamos la paz’.
Un total de 226 exguerrilleros asesinados, desplazamientos obligados, confinamiento por actores armados y la desaparición forzada también forman parte de este escabroso escenario, aseguró Sandino.
Mientras, el gobierno de Iván Duque ha contestado con absolutas acciones de complicidad, dijo.
La congresista insistió en que Duque hace ‘oídos sordos al clamor ciudadano y decide deliberadamente no implementar medidas para detener el desangre’ (como el punto 3.4 del Acuerdo de Paz).
Por el contrario —enfatizó—, ‘el discurso del presidente parece dar carta blanca a los abusos policiales y militares, posa en fotos con ellos y se niega a reconocer la necesidad de una reforma’.
Datos de organizaciones de derechos humanos indican que la policía está involucrada en 39 hechos de violencia física al día, uno de violencia sexual cada cinco y un homicidio cada 48 horas.
(Con información de Prensa Latina)