Papa Francisco pide respetar, cuidar y valorar a las mujeres
El mundo necesita a las mujeres para encontrar la paz, escapar de la violencia, el odio, y volver a tener miradas humanas dijo
Ciudad del Vaticano. En la misa dedicada hoy a la Virgen María, y con motivo de la LVII Jornada Mundial de la Paz, el papa Francisco resaltó la importancia de las madres y mujeres para enfrentar al odio y la violencia.
En la homilía pronunciada durante ese acto, que dio inicio este lunes a las 10:00 hora local, el Santo Padre expresó ante los casi siete mil fieles reunidos en la Basílica de San Pedro que “toda sociedad necesita acoger el don de la mujer, de cada mujer: respetarla, cuidarla, valorarla”.
“El mundo necesita mirar a las madres y a las mujeres para encontrar la paz, para escapar de las espirales de violencia y odio, y volver a tener miradas humanas”, aseveró el Sumo Pontífice, y añadió que nuestro tiempo, vacío de paz, necesita de las madres que cuidan de sus hijos, los congregan y los consuelan, escuchan sus penas y enjugan sus lágrimas.
En relación con la Jornada Mundial de la Paz de la Iglesia, dedicada este 1 de enero al reto que representa para la humanidad el avance de la Inteligencia Artificial, Francisco se refirió en su mensaje al mismo, publicado desde mediados de diciembre último, a las promesas y desafíos aparejados a ese desarrollo tecnológico.
“En el contexto ideológico de un paradigma tecnocrático, animado por una prometeica presunción de autosuficiencia, las desigualdades podrían crecer de forma desmesurada, y el conocimiento y la riqueza acumularse en las manos de unos pocos, con graves riesgos para las sociedades democráticas y la coexistencia pacífica”, alertó.
El Papa se refirió a la amenaza que significa para la paz el desarrollo de los denominados sistemas autónomos de armas letales, incluido el uso bélico de la Inteligencia Artificial, la cual debería estar al servicio de un mejor potencial humano y de nuestras más altas aspiraciones, no en competencia con ellos.
En su reflexión sobre este tema, trató sobre las implicaciones en el ámbito laboral, con la posible sustitución del hombre por máquinas, así como en la impartición de justicia, pues “cuando los algoritmos extrapolan informaciones, siempre corren el riesgo de distorsionarlas”.
“Los desarrollos tecnológicos que no llevan a una mejora de la calidad de vida de toda la humanidad, sino que, por el contrario, agravan las desigualdades y los conflictos, no podrán ser considerados un verdadero progreso”, enunció.
Tras finalizar la misa, en horas del mediodía, el papa Francisco se asomó a la ventana del estudio del Palacio Apostólico Vaticano para recitar Ángelus ante los fieles y peregrinos reunidos en la plaza de San Pedro.
En sus palabras tras ese rezo, el Papa se refirió a los conflictos que tienen lugar en el mundo, en particular al que se desarrolla en Ucrania y a la guerra entre Israel y Palestina, donde más de 22 mil personas ya murieron en la Franja de Gaza víctimas de los bombardeos de Tel Aviv, y pidió una vez más que “oremos para que llegue la paz”.
(Con información de Prensa Latina)