Montenegro tienta a turistas con playas “sin coronavirus”
En un primer momento, el micro país sólo se abrirá a los turistas procedentes de naciones consideradas sanitariamente seguras
Último país de Europa en detectar un caso de coronavirus y primero en declararse libre de la pandemia, Montenegro tiene la intención de jugar la carta de la seguridad sanitaria para incitar a los turistas a regresar a sus espectaculares playas.
En los balnearios que bordean las costas adriáticas del pequeño país de los Balcanes, empleados de hoteles rastrillan con ansias la arena desde hace semanas.
Las autoridades anunciaron que Montenegro, donde no se han registrado ninguna nueva infección desde el 5 de mayo, ya no tiene ningún caso activo de coronavirus.
El lunes, el primer ministro Dusko Markovic anunció la buena noticia en este pequeño país donde el turismo representa una quinta parte del PIB y de los puestos de trabajo.
“Déjenme quitarme la máscara. Desde hoy, Montenegro está libre de la pandemia. Su lucha contra un enemigo invisible y desconocido dio resultado”, precisó con orgullo Markovic.
Inmediatamente después del anuncio, los operadores turísticos difundieron numerosas imágenes de aguas azules y de suntuosos paisajes de montaña, acompañados de la frase “Primer destino de Europa sin coronavirus”.
“La gente busca la seguridad”, explicó a la AFP Ana Nives Radovic, directora de la asociación turística de Kotor. Esta ciudad medieval, declarada Patrimonio Mundial de la Unesco, es un destino importante para los pasajeros de cruceros y se jacta de no haber registrado jamás ningún caso de coronavirus.
Desde su primera contaminación, hace diez semanas, el país, de 630.000 habitantes, detectó solo 300 casos y registró únicamente 9 muertes por covid-19.
“La gente quiere un destino donde pueda sentirse segura de que no le pasará nada malo”, continúa Radovic.
Higiene irreprochable
Natasa Spiric Smiljanic, directora de dos hoteles, con vistas a magníficas bahías, confirma poner en práctica todas las medidas posibles para asegurar una higiene irreprochable. Su objetivo es lograr que la clientela francesa, que suele afluir a partir de la primavera (boreal), regrese.
“Estamos preparados, hemos establecido nuevas normas de higiene y tenemos el espacio necesario” para hacer respetar el distanciamiento social, comenta a la AFP. Sin embargo, añade “no tener mucha esperanza que la frecuentación sea masiva como antes del coronavirus”.
La recuperación económica será complicada. La Organización Mundial del Turismo (OMT) predice un colapso del 60% al 80% del número de turistas internacionales en el territorio.
Las condiciones para la reapertura de las fronteras en Europa siguen siendo poco claras, al igual que las de la reanudación del tráfico aéreo. Se espera que el número de turistas en Montenegro sea muy inferior a los 2,6 millones que llegaron en 2019, cifra que representa más de cuatro veces la de la población.
Sobre todo, porque en un primer momento, Montenegro sólo se abrirá a los turistas procedentes de países considerados como seguros, es decir, los que tienen menos de 25 contaminaciones por 100 mil habitantes.
Si bien los croatas, los austríacos o los griegos serán bienvenidos, este no será el caso para los británicos y los rusos, que representan grandes mercados para la industria turística local.
(Con información de AFP)