La guerra económica de EU contra Cuba golpea a Airbnb
Los obstáculos se redoblaron durante el gobierno del republicano Donald Trump y continúan vigentes con el demócrata Joe Biden
Washington, Estados Unidos. Las restricciones del Gobierno de Estados Unidos a las remesas y servicios de pago en Cuba hacen cada vez más difícil cualquier negocio con la isla, como ocurre con la plataforma digital de alojamiento Airbnb.
Para la compañía, que desde 2015 lanzó sus servicios en Cuba, ahora es “cinco veces más difícil”, todo un reto, operar allí, por el endurecimiento del bloqueo que la limita y afecta su alcance.
Según advirtieron algunos observadores, más allá de los desafíos técnicos, los anfitriones tienen que luchar contra los obstáculos redoblados en particular durante la administración de Donald Trump (2017-2021) y que continúan vigentes con el demócrata Joe Biden.
El pasado día 4 el Departamento del Tesoro de Estados Unidos anunció que impuso una multa por más de 90 mil dólares a Airbnb por las acusaciones de violar las sanciones relacionadas con las transacciones no autorizadas realizadas en su plataforma de pagos.
«Airbnb Payments acordó remitir 91 mil 172,29 dólares para liquidar su potencial responsabilidad civil por aparentes violaciones de las sanciones contra Cuba administradas por la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro», detalló el aviso.
El asesor de Seguridad Nacional del expresidente Barack Obama (2009-2017), Ben Rhodes, calificó la multa de “estúpida, contraproducente y trumpiana” al tratar de negar a los ciudadanos de este país la capacidad de proveer de ingresos directos al pueblo cubano y desarrollar las conexiones entre ambos lados.
De acuerdo con datos recopilados por la prensa, el turismo estadounidense a la isla se disparó en la segunda mitad de la década de 2010, pues pasó de 160 mil visitantes en 2015 a casi 640 mil en 2018, alrededor del 15 por ciento del total de viajeros foráneos.
Pero bajo el mandato de Trump el crecimiento de excursionistas estadounidenses hacia el propio destino se ralentizó en 2017 y 2018, y cayó sustancialmente en 2019.
El cambio de política de la administración Trump –subrayaron expertos- evidenció que mientras Obama abrió a Cuba, el republicano cerró.
El 2021 concluyó con un bloqueo económico, comercial y financiero recrudecido con las 243 medidas adoptadas por Trump en su intento de asfixiar al pueblo cubano, más de 50 de ellas en medio del escenario agravado por la pandemia de Covid-19.
En junio de 2020 el Departamento de Estado incluyó en su lista negra a siete compañías cubanas, entre ellas a la institución financiera Fincimex, agente principal para los pagos de Airbnb en la mayor de las Antillas.
Aunque durante su campaña electoral Biden prometió dar marcha atrás a esas sanciones, casi 11 meses después de asumir el cargo sigue en la misma línea de hostilidad respecto a Cuba que su antecesor republicano, a juicio de analistas.
(Con información de Prensa Latina)