Emplazamiento a huelga en Panamá cimbra a empresas
El llamado a paro fue ratificado la víspera por el Sindicato Único de Trabajadores de la Construcción y Similares
Panamá, Panamá. El gremio empresarial de Panamá manifestó su preocupación por el impacto que tendría hoy en la economía la huelga nacional convocada para el 4 de abril por los trabajadores de la construcción.
A juicio del presidente de la Cámara de Comercio, Industria, Agricultura de Panamá, José Ramón Icaza, un paro de esa magnitud, pues se trata de una parte importante del sector laboral, afectaría también a los indirectos que dependen de esa actividad.
El llamado a huelga por tiempo indefinido que ratificara la víspera el Sindicato Único de Trabajadores de la Construcción y Similares (Suntracs), según su máximo dirigente, Saúl Mendez, exige que la Cámara Panameña de la Construcción (Capac) incluya el requerido aumento salarial para los obreros en el Convenio Colectivo de Trabajo 2022-2025.
Luego de una negociación que comenzó en septiembre de 2021, pero sin los resultados esperados, el Suntracs dio por agotadas esas pláticas, pues la Capac mantiene su postura en materia de salario.
Por un lado, el Sindicato aspira a un incremento de los sueldos de 70 centavos de dólar la hora en cuatro años, mientras que Capac oferta siete centavos para el mismo periodo, considerando el actual estado de la economía y de la industria.
Icaza indicó que una huelga en 2018 de ese sector, con una duración de 30 días, tuvo un impacto un poco más de uno por ciento en el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) y pérdidas multimillonarias en la economía panameña.
Para el consultor laboral René Quevedo, las huelgas son nefastas para los esfuerzos por cultivar un clima de confianza que estimule las inversiones necesarias para generar empleos formales en la empresa privada.
El experto señaló que ya 2020 vio a 648 mil trabajadores asalariados perder sus puestos o suspensión de contratos laborales.
De otra parte, el economista Gersán Joseph Garzón afirmó que esa medida va a complicar la tímida reactivación económica, afectada antes por la pandemia de la Covid-19.
Méndez recalcó a la prensa que el objetivo es el acuerdo, no la huelga.
Mientras, otro de los dirigentes de Suntracs presente en las negociaciones, Genaro López, señaló a Prensa Latina que “no es justo que los insumos de la construcción han subido de precios y los empresarios los pagan, pero cuando el obrero pide un aumento salarial entonces es un problema”.
De acuerdo con estadísticas oficiales, la participación de la construcción en el PIB disminuyó, de 14,5 por ciento en 2019 a 8,8 el año pasado, lo que refleja una contracción de las inversiones y el consecuente aumento del desempleo en el sector.
(Con información de Prensa Latina)