Al menos 10 muertos en un atentado en Jalalabad
Un ataque este miércoles contra el departamento de educación de la ciudad de Jalalabad, en el este de Afganistán, dejó al menos diez muertos, indicaron las autoridades.
La operación, que no fue reivindicada, duró más de cuatro horas. Las fuerzas de seguridad enviadas al lugar avanzaron lentamente hacia el edificio, donde había al menos dos asaltantes.
Un fotógrafo de la AFP que llegó al lugar acompañado por las autoridades pudo contar diez cuerpos, además de los de los dos atacantes.
El portavoz del gobernador provincial, Attaullah Khogyani, confirmó un balance de diez muertos, entre ellos un guardia de seguridad, así como diez heridos.
El ataque empezó a las 09H00 (04H30 GMT) y terminó poco antes de las 13H00, indicó una fuente de seguridad y explicó que el lugar fue «limpiado por completo».
Las acciones violentas incluyeron varias explosiones (dos o tres, según las fuentes), seguidas de disparos.
«Oí disparos de armas ligeras, seguidas de una gran explosión que rompió las ventanas. Huí de mi tienda y luego hubo una segunda explosión procedente del edificio de educación y todo el mundo empezó a correr», explicó un comerciante cercano al lugar, Qari Samiullah.
El ataque tuvo lugar el mismo día en que se celebran los exámenes de ingreso de 16 mil estudiantes a la universidad de Jalalabad..
El portavoz del departamento provincial de educación, Asif Shinwari, dijo a la AFP que varios profesores habían estado entregando los resultados de los exámenes en el edificio cuando tuvo lugar el ataque.
Jalalabad es la capital de Nangarhar, una provincia montañosa del este de Afganistán, fronteriza con Pakistán, donde actúan los insurgentes talibanes así como el grupo yihadista Estados Islámico.
La ciudad es con frecuencia objeto de atentados, en la que mayoría de víctimas suelen ser civiles. El último ocurrió el martes, un atentado suicida contra los servicios de inteligencia afganos reivindicado por el EI y que dejó doce muertos.
El departamento de educación ya fue atacado hace un mes, el 11 de junio, cuando un kamikaze se hizo estallar en la entrada del edificio mientras otros atacantes disparaban contras las fuerzas de seguridad. Al menos diez personas resultaron heridas.
La presión de las fuerzas aganas, con el apoyo de militares de Estados Unidos, ha permitido expulsar al EI de tres distritos de la región de Jalalabad que estuvieron bajo su control en los dos últimos años.
Sin embargo todavía hay combatientes en la zona. Además, desde que a mediados de junio terminó una tregua de tres días entre las fuerzas del gobierno y los talibanes, este región es la que más atentados sufre.
El próximo miércoles terminará en Yeda (Arabia Saudita) una conferencia internacional auspiciada por la Organización para la Cooperación Islámica en la que participan un centenar de dignatarios religiosos. Se espera que el foro termine con una condena del terrorismo y del conflicto afgano, que se considera que no tiene legitimidad religiosa.
En junio una fetua del consejo de los ulemas afganos ya declaró que el terrorismo es «haram» (prohibido) y pidió negociaciones de paz.
La conferencia en Arabia Saudita coincide con una cumbre de la OTAN que se celebra este miércoles en Bruselas en presencia del presidente Donald Trump.
La Organización del Tratado del Atlántico Norte tiene 16 mil hombres desplegados en Afganistán para apoyar a las fuerzas afganas, 13 mil de ellos estadounidenses.
(Con información de AFP)