Agua y saneamiento, básicos para escuelas post covid 19
Alrededor de 818 millones de niños carecen de instalaciones básicas para lavarse las manos en sus centros escolares en todo el mundo
Naciones Unidas. El acceso a servicios de agua y saneamiento es esencial para un regreso seguro a la escuela, en el contexto de la pandemia que padece hoy el mundo, destacó el secretario general de ONU, António Guterres.
Por medio de su cuenta oficial en Twitter, el máximo representante de Naciones Unidas recordó que lavarse las manos es una de las formas más efectivas de limitar la propagación de la Covid-19, pero muchos centros de educación carecen de esos servicios de agua y saneamiento.
El año pasado, apuntó, el 43 por ciento de las escuelas del mundo no tenían instalaciones básicas para lavarse las manos.
Guterres también compartió en Twitter un enlace al sitio digital del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), en el cual se ahonda sobre esa situación.
De acuerdo con un reporte de Unicef y la Organización Mundial de la Salud (OMS), una de cada cinco escuelas en el orbe carecían de instalaciones para el lavado de las manos y jabón antes de la pandemia de Covid-19.
Actualmente, alerta el informe, 818 millones de niños carecen de instalaciones básicas para lavarse las manos en sus centros escolares, y esto los pone en mayor riesgo de contraer la Covid-19 y otras enfermedades transmisibles.
Más de un tercio de esos niños viven en el África subsahariana. En los países menos desarrollados, añade, la mitad de las escuelas carecen de servicios básicos de agua y saneamiento.
Contar con instalaciones para lavarse las manos con agua y jabón es una condición fundamental para reabrir los colegios de forma segura en medio de la pandemia, resaltaron la Unicef y la OMS.
Ambas agencias de ONU enfatizaron en que los Gobiernos deben equilibrar la necesidad de implementar medidas de salud pública con los impactos sociales y económicos asociados a las restricciones para detener la expansión del nuevo coronavirus.
En ese sentido, indicaron que hay pruebas claras del impacto negativo de los cierres prolongados de escuelas para los niños.
(Con información de Prensa Latina)