Advierten intento de golpe de Estado en Kazajistán
Respalda Belarús las medidas implementadas por las autoridades de la nación asiática para restablecer la normalidad del país
Minsk. Belarús calificó de intento de golpe de Estado violento los sucesos en Kazajastán y manifestó el apoyo a los esfuerzos de las autoridades de Nursultan por detener los disturbios.
En un comunicado divulgado este jueves el Ministerio de Asuntos Exteriores subrayó su respaldo a las medidas implementadas por las autoridades de la nación asiática para restablecer el funcionamiento normal del país.
Asimismo, llamó la atención sobre “la buena coordinación de las acciones” por parte de los manifestantes enfrentados a las fuerzas del orden público.
Ante tal situación, Minsk ayudará a Kazajastán y cumplirá al máximo sus compromisos como aliado dentro de la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (OTSC), por lo que enviará militares como parte de las fuerzas de mantenimiento de la paz, subrayó el documento.
Este jueves los presidentes de Uzbekistán y Tayikistán, Shavkat Mirziyóyev y Emomalí Rajmón, abordaron por teléfono las relaciones bilaterales e intercambiaron puntos de vista sobre la situación en Kazajastán, informó el servicio de prensa de Tashkent.
Los mandatarios instaron a las partes a mostrar moderación y a resolver los problemas de forma pacífica, a la vez que expresaron su disposición de combinar esfuerzos para garantizar la paz, la estabilidad y la seguridad en la región.
El Ministerio de Defensa tayiko aseguró a la agencia de noticias rusa TASS que un batallón de mantenimiento de la paz de ese país, compuesto por 200 militares, está listo para ser desplegado en Kazajastán para prestar asistencia en el marco de la OTSC.
Agregó que las tropas serán enviadas a esa nación por etapas y que los primeros 100 soldados llegarán este jueves.
Las manifestaciones comenzaron el 2 de enero en las ciudades de Zhanaozen y Aktau, en el suroeste del país, donde los residentes protestaron contra la subida de los precios del gas natural licuado.
Dos días después, se produjeron disturbios y enfrentamientos con la Policía en Almaty (sureste) y otras ciudades, en los que se han registrado muertes, heridos, además de cuantiosos daños a edificios públicos, empresas y numerosas acciones de vandalismo.
El mandatario kazajo decretó el estado de emergencia durante dos semanas en todo el territorio y destituyó al Gobierno, al cual consideró culpable de la liberalización de los precios del combustible y el consecuente aumento de estos.
Tokáyev se puso al frente del Consejo de Seguridad nacional y en su última reunión calificó de terroristas a los implicados en los enfrentamientos y solicitó ayuda a los socios de la OTSC (Armenia, Belarús, Kirguistán, Rusia y Tayikistán).
Las primeras unidades de mantenimiento de la paz ya comenzaron a implementar sus tareas en Kazajastán.
(Con información de Prensa Latina)
