230 detenidos en nuevas protestas en Hong Kong
Carrie Lam prometió este lunes una reforma educativa porque el sistema actual contribuye a alimentar el movimiento anti chino
La policía de Hong Kong anuncio este lunes la detención de 230 personas, entre ellas un niño de 12 años, durante el fin de semana, en las primeras protestas políticas en el territorio desde que empezó la pandemia de coronavirus.
Por su parte la jefa ejecutiva de Hong Kong, Carrie Lam, favorable al gobierno de Pekín, prometió este lunes una reforma educativa porque considera que el sistema actual contribuye a alimentar el movimiento antichino, que el año pasado sacudió este territorio de la isla.
«En lo que concierne la manera, en el futuro, de abordar las clases de ‘liberal studies’ [una clase de cultura general para desarrollar el espíritu crítico] vamos a clarificar las cosas antes de que termine el año», declaró en una entrevista publicada el lunes por el periódico Ta Kung Pao, favorable a Pékin.
El domingo, dos días después de que se levantara entre otras la prohibición de reunirse por el coronavirus, la policía antidisturbios dispersó a los manifestantes que se juntaron en varios centros comerciales del distrito de Mong Kok, usando gas pimienta y porras.
Según los responsables hospitalarios, 18 personas resultaron heridas.
En medio de nuevas tensiones políticas, las declaraciones de Lam podrían suscitar la cólera de los militantes prodemocracia de Hong Kong, que temen que Pekín reduzca las libertades que tiene el territorio.
Con el apoyo de Pekín, el gobierno de Lam intenta aprobar un proyecto de ley para sancionar las ofensas al himno nacional chino. Varias personalidades cercanas al poder piden por su parte una ley contra la sedición.
La nueva legislación tiene el objetivo de frenar el movimiento, cada más amplio, en particular entre los jóvenes, que demandan más autonomía a China.
La oposición cree que estas leyes reducirán la libertad de expresión.
Las escuelas y universidades de Hong Kong están entre las mejores de Asia y la educación tiene una tendencia occidentalista que no existe en la China continental.
Los cursos de cultura general fueron introducidos en 2009 y las escuelas pueden elegir la manera de enseñarlos.
Por eso se han convertido en objeto de las críticas de los medios oficiales chinos y de los políticos pro-Pekín, que reclaman una educación más patriótica.
En la entrevista, Lam asegura que esas clases permiten a los profesores promover sus posiciones políticas y que tienen que estar más vigiladas por el gobierno.
Entre junio y diciembre de 2019, Hong Kong vivió grandes manifestaciones, acompañadas de enfrentamientos entre radicales y policías para denunciar la influencia de Pekín.
Más de 8 mil personas fueron detenidas. Cerca de un 17% eran estudiantes de secundaria.
(Con información de AFP)