200 arrestados y 188 armas incautadas en Hong Kong
Durante las protestas del sábado se registraron acciones de mucha violencia e incluso arruinaron la sede de la agencia Xinhua
Beijing, China. La policía de Hong Kong informó el arresto de más de 200 personas y 188 armas incautadas durante las protestas del sábado, que igualmente se tornaron violentas e incluso arruinaron la sede de la agencia Xinhua.
Esa institución detalló en un comunicado que los individuos enfrentan cargos por reunirse en público sin autorización, portar artefactos peligrosos, daños criminales y cubrirse el rostro.
Entre los artículos confiscados hay bombas de petróleo, bastones y atomizadores de pimienta.
Este sábado miles de manifestantes volvieron a tomar las calles en distintos puntos de Hong Kong, y como en ocasiones anteriores, al caer la noche grupos radicales recurrieron a la violencia, levantaron barricadas, lanzaron explosivos, confrontaron con las fuerzas del orden y destruyeron edificios públicos.
La sede de la agencia noticiosa Xinhua para Asia-Pacífico fue uno de los sitios vandalizados, sus directivos emitieron un texto de condena a ese hecho y expresaron apoyo al Gobierno y policía a tomar las medidas necesarias para poner fin a la agitación.
Mientras, las autoridades de la región administrativa especial (en el sur de China) reafirmaron la determinación de poner fin a la situación por las vías legales, así como restaurar el orden y proteger la vida de la población.
Desde junio pasado, especialmente cada fin de semana, Hong Kong vive intensas revueltas con peligro para la estabilidad socioeconómica.
Líderes del país asiático advierten sobre la existencia de una agenda separatista alimentada por fuerzas externas de Occidente, pues lo que comenzó con marchas en rechazo a una ley de extradición -oficialmente eliminada- se convirtió en un movimiento hostil que siempre termina en choques y hasta agresiones a personas con puntos de vista distintos.
La crisis se deterioró aun más en octubre, especialmente con la prohibición al uso público de mascaras, y llegó al punto de que la policía endureció las medidas antidisturbios para controlar a las masas más extremistas y evitar acciones de corte terrorista.
Según reconoció el mismo Gobierno local, con el descontento salieron a flote muchas problemáticas políticas, económicas y sociales como los altos precios de las viviendas, la distribución de la riqueza y oportunidades al público de opinar sobre las decisiones estatales, entre otras.
Los manifestantes exigen, además, la liberación de los apresados, sufragio directo, investigar la conducta policial y dejar de denominar las marchas como disturbios.
Ante la continuidad de la crisis, el Partido Comunista de China anunció planes para reforzar y proteger el principio de ‘Un País, dos sistemas’ en Hong Kong y también Macao, así como avanzar en la reunificación pacífica de todo el territorio nacional.
(Con información de Prensa Latina)