15 muertos en combate entre civiles y militares en Iguala
En el lugar se hallaron armas de alto poder y tres vehículos señalados como robados en el que se trasladaban los hombres armados
Catorce presuntos delincuentes y un militar murieron este martes en un enfrentamiento en el estado de Guerrero (sur), un día después de que 13 policías murieran abatidos en una emboscada en el vecino estado Michoacán, informó el gobierno regional.
«Los civiles armados iniciaron una agresión de frente a los elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional, dando como resultado el fallecimiento de un elemento militar, así como de 14 civiles armados», dijo a la AFP el vocero de Seguridad del gobierno de Guerrero, Roberto Álvarez.
Los hechos se registraron luego de que un centro policíaco de Guerrero recibió una llamada anónima que alertó sobre la presencia de hombres armados en la comunidad de Tepochica, municipio de Iguala, añadió el vocero.
En el lugar se han encontrado hasta el momento, armas de alto poder y tres vehículos señalados como robados en el que se trasladaban los hombres armados, concluyó el vocero.
En Guerrero, que tiene costas en el Pacífico, actúan distintas bandas del crimen organizado, principalmente dedicadas al tráfico de drogas, que en los últimos años han librado numerosos enfrentamientos por el control de las rutas del narcotráfico.
Y la región donde se encuentra Iguala ha sido particularmente violenta. En ese municipio desaparecieron el 26 de septiembre de 2014 los 43 estudiantes de Ayotzinapa después de ser baleados por policías corruptos y sicarios. Hasta el momento su paradero sigue sin conocerse.
Dos jornadas violentas al hilo
El enfrentamiento de Guerrero ocurre un día después de que 13 policías murieran cuando el convoy en el que se dirigían a cumplir un mandato judicial fue emboscado en el municipio de Aguililla, por hombres a bordo de camionetas blindadas.
Este martes se llevó a cabo el sepelio en medio de críticas al gobierno del presidente de izquierda, Andrés Manuel López Obrador, que defendió su estrategia de seguridad.
«Es muy lamentable lo que sucedió. No lo deseamos, estamos ayudando a las autoridades locales, en este caso al gobierno del estado, y vamos a seguir con nuestra estrategia», dijo el mandatario en su habitual conferencia matutina.
El homenaje de cuerpo presente de los policías en Morelia, capital de Michoacán, se llevó a cabo entre gritos de «¡Justicia!», «¡Qué hace nuestro gobierno!», «¡Cuándo van a dejar de matar!».
«No vamos a permitir que este acto no reciba reparación o justicia, porque quien los agrede a ustedes (los policías), agrede a todo Michoacán y agrede a todo México», dijo el gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles.
El presidente mexicano ha centrado su estrategia contra la violencia en atacar «los orígenes» que la causan como la desigualdad y la pobreza, estableciendo una larga lista de programas sociales, al tiempo que creó una militarizada Guardia Nacional.
«Yo estoy optimista, creo que vamos a lograr la paz en el país, que vamos a lograr evitar estos hechos violentos, que es un proceso, vamos avanzando con mucha firmeza, organizándonos», insistió López Obrador.
Los agresores en la emboscada dejaron mensajes con amenazas para las instituciones de seguridad e incendiaron al menos dos patrullas.
El gobierno federal dijo inicialmente que 14 policías murieron en la emboscada, pero las autoridades estatales sostuvieron que fueron 13.
López Obrador «apostó a una tregua con la delincuencia organizada y hoy vemos la consecuencia de ese acuerdo de facto, que no los persigue, que no los combate, pero que tristemente incrementa los índices delictivos en todo el país», acusó de su lado el presidente del opositor Partido Acción Nacional (PAN-derecha), Marko Cortés.
El gobierno del entonces presidente Felipe Calderón (del PAN) lanzó a finales de 2006 una polémica ofensiva militar contra el crimen organizado que es señalada por especialistas y defensores de los derechos humanos como una de las principales causas del incremento de la violencia en México.
Según cifras oficiales, desde entonces se han registrado más de 250.000 asesinatos, aunque no se detalla cuántos casos están ligados al crimen organizado.
De enero a agosto de este año se han registrado 23.063 víctimas de homicidio doloso, un dato que se encamina a romper el récord de 33.749 asesinatos de 2018.
(Con información de AFP)